Este texto de Mauricio Candiani, escrito el 2 de Diciembre de 2024, analiza la capacidad de individuos y organizaciones para trabajar bajo presión, destacando las características de quienes sobresalen en situaciones de alta tensión. El autor explora la naturaleza de la presión en el ámbito empresarial y ofrece consejos para gestionarla eficazmente.
Resumen:
El texto define trabajar bajo presión como la capacidad de ejecutar tareas en condiciones desfavorables, considerando tanto la dificultad de la actividad como el tiempo disponible.
Se identifican tres rasgos clave de las personas que se destacan bajo presión:
No paralizan las decisiones, incluso ante riesgos o incertidumbre. Se enfatiza la importancia de la práctica y la iteración en la toma de decisiones.
Reasignan prioridades con inmediatez, priorizando las tareas más relevantes en función del tiempo y los recursos disponibles. Se destaca que cuando todo es prioridad, nada lo es.
Actúan con una velocidad relativa al momento, adaptando el ritmo al contexto y a la naturaleza de la tarea. Se compara el trabajo bajo presión con una carrera de resistencia.
El autor destaca que trabajar bajo presión requiere un control emocional, capacidad para procesar la tensión colectiva y la necesidad de descanso y actividades para liberar la mente.
Se establece una analogía entre la presión en física y en el ámbito empresarial, definiendo la presión empresarial como "la descompensación por unidad de normalidad aspirada".
Se concluye que las personas que dominan el trabajo bajo presión son valiosas para las organizaciones.
Conclusión:
El trabajo bajo presión es un desafío común en el ámbito empresarial que requiere habilidades específicas.
La capacidad de gestionar la presión es una cualidad valiosa y deseable en los empleados.
El desarrollo de estas habilidades requiere práctica, autoconciencia y estrategias para el manejo del estrés.
Las organizaciones deben valorar y recompensar a los individuos que demuestran excelencia en entornos de alta presión.