Este texto de María Helena González, publicado en REFORMA el 28 de noviembre de 2024, argumenta la importancia de la financiación pública para los museos mexicanos, relacionándola con el bienestar social y el desarrollo humano. González critica el recorte presupuestal del 30% para cultura en el PEF, destacando el impacto negativo en la experiencia del público y en el funcionamiento de las instituciones museísticas. El texto utiliza datos estadísticos y estudios internacionales para respaldar su postura.
Resumen
El número de visitantes a museos en México aumentó significativamente en 2023 (48.4 millones), demostrando la importancia de estos espacios para el bienestar subjetivo, según datos del INEGI. Sin embargo, el recorte presupuestal afecta negativamente este impacto multidimensional (emocional, intelectual y social) señalado por Falk y Dierking.
La valoración del patrimonio cultural mexicano se centra principalmente en términos económicos, ignorando su impacto en el bienestar. Esto se refleja en la falta de inversión en aspectos cruciales como la catalogación, el mantenimiento, la seguridad y la investigación en los museos.
La Ley General de Cultura y Derechos Culturales de 2017, si bien promueve el acceso a bienes culturales, carece de una aplicación práctica que considere los beneficios del acceso a la cultura en términos de bienestar. Mientras que países como Reino Unido, España, Italia y Canadá avanzan en la investigación sobre el bienestar en museos, México se centra principalmente en el capital social, dejando de lado aspectos como la salud y los efectos en públicos vulnerables.
El sector cultural mexicano contribuyó con el 2.7% del PIB en 2023, con las artes visuales y plásticas representando una pequeña parte (0.1134%). El recorte presupuestal refuerza una política cultural populista, según Canclini (1990), en lugar de fomentar el acceso a experiencias culturales diversas y personalizadas.
La Nueva Escuela Mexicana (NEM) obliga a los profesores a calificar la educación estética, pero la falta de recursos en espacios de educación informal limita el impacto de esta materia. La autora argumenta que limitar los recursos para los museos atenta contra el desarrollo humano y el bienestar de los mexicanos, ejemplificando con la salida del país de acervos como el de la Colección Gelman.
Conclusión
María Helena González concluye que la reducción presupuestal para la cultura en México, específicamente para los museos, es una decisión perjudicial que afecta el bienestar de la población y el desarrollo del país. La autora aboga por una política cultural que valore el impacto multidimensional de los museos y que garantice su adecuado funcionamiento para asegurar el acceso a la cultura como un derecho fundamental.
