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El siguiente texto, escrito por Carlos Martínez Macías el 4 de Marzo de 2025 en Jalisco, analiza la implementación del programa de verificación vehicular en el estado, destacando contradicciones y posibles fines recaudatorios detrás de la iniciativa.

El refrendo vehicular en Jalisco aumentó significativamente de 2024 a 2025, pasando de 767 pesos a 900 pesos, un incremento de 133 pesos.

Resumen

• El gobierno del estado de Jalisco anuncia un programa de verificación vehicular obligatoria, inicialmente prometiendo gratuidad y exención de multas, pero esto no se cumple.
• Se ofrece un paquete "tres por uno" de 900 pesos que incluye refrendo, reemplacamiento y verificación gratuita.
• Para obtener las nuevas placas, es necesario realizar la verificación, incluso si el vehículo no la aprueba, lo que contradice el objetivo de mejorar la calidad del aire.
• A partir de 2026, los vehículos sin placas tipo Collage (expedidas desde 2019) serán multados si no las renuevan, lo que implica una multa indirecta por no verificar.
• El costo del refrendo aumentó significativamente en 2025, lo que contradice la afirmación de que el paquete "tres por uno" solo cubre el costo del refrendo.
• La verificación es obligatoria solo en 17 municipios que integran zonas metropolitanas, pero se exige a vehículos de estancia permanente en esas zonas.
• La Ley Estatal del Equilibrio Ecológico y Protección al Ambiente establece la obligatoriedad de la verificación, pero el programa parece tener un enfoque más recaudatorio que ambiental.
• El gobierno de Pablo Lemus, a través de la Subsecretaría del Interior, realizará un foro el 6 de marzo para discutir el programa de verificación con activistas y organizaciones.

Conclusión

• El programa de verificación vehicular en Jalisco presenta contradicciones y ambigüedades que generan desconfianza en la ciudadanía.
• El aumento en el costo del refrendo y la obligatoriedad del reemplacamiento sugieren un posible fin recaudatorio detrás del programa.
• El foro del 6 de marzo representa una oportunidad para que el gobierno de Pablo Lemus escuche las preocupaciones de la sociedad civil y realice ajustes al programa.
• Es crucial que el programa de verificación vehicular sea transparente y efectivo en su objetivo de mejorar la calidad del aire, en lugar de ser percibido como una medida recaudatoria.