Este texto de Odette Ferrer, pasante de la oficina de Relaciones Exteriores de Naciones Unidas para el Cambio Climático, escrito el 28 de noviembre de 2024, analiza los resultados de la COP29 celebrada en Bakú, Azerbaiyán. El artículo critica la falta de compromiso real de las potencias mundiales frente al cambio climático y la insuficiencia de los acuerdos alcanzados.
Resumen:
La COP29 en Bakú se caracterizó por la falta de compromiso real con el cambio climático, tensiones políticas y el silenciamiento de las voces de las naciones más afectadas.
El Nuevo Objetivo Colectivo de Financiación (NCQG) fue ampliamente criticado por su insuficiencia, ofreciendo $300,000 millones anuales hasta 2035, muy por debajo de los $1.3 billones requeridos. Países como Estados Unidos, Arabia Saudita, Azerbaiyán y la Unión Europea fueron señalados por obstaculizar los avances.
Juan Carlos Monterrey (Panamá) denunció la debilidad de los borradores, mientras que bloques como AOSIS y los Países Menos Desarrollados abandonaron temporalmente las negociaciones en señal de protesta. Susana Muhamad (Colombia) lamentó la ignorancia de las voces vulnerables.
La influencia de los lobbies de combustibles fósiles y las tensiones geopolíticas, según Annalena Baerbock (Alemania), marcaron las negociaciones, calificadas como "un juego de poder geopolítico".
A pesar del aumento del financiamiento del NCQG, delegados como Evans Njewa lo calificaron como una "oportunidad perdida", perpetuando desigualdades históricas. Hubo avances en transparencia, adaptación, perspectiva de género y la implementación del Artículo 6. China reafirmó su liderazgo ambiental y Estados Unidos respaldó acuerdos clave.
La participación de Argentina bajo el gobierno de Javier Milei y la inédita presencia de los talibanes, junto a las tensiones entre Francia y Azerbaiyán, reflejaron un sistema internacional fragmentado.
Brasil, próximo anfitrión de la COP30, prometió que será la "COP de las COPs", Marina Silva advirtió sobre la necesidad de evitar un fracaso similar al de Copenhague (2009).
Conclusión:
El texto de Odette Ferrer presenta una visión crítica de la COP29, destacando su fracaso en abordar de manera efectiva la crisis climática debido a la falta de compromiso de las potencias mundiales y la influencia de intereses geopolíticos y económicos. La cumbre, según el análisis, refleja la complejidad y el estancamiento en las negociaciones internacionales sobre el cambio climático.
