Calificación crediticia y presupuesto

Este texto de Luis Gonzalí, escrito el 22 de noviembre de 2024, analiza la decisión de la calificadora Moody's de cambiar la perspectiva de la calificación crediticia de México a negativa antes de la presentación del Presupuesto 2025. El autor argumenta que la decisión de Moody's no se debió únicamente a preocupaciones presupuestales, sino también a la percepción de un debilitamiento en la gobernanza y el estado de derecho en el país.

Resumen:

• El Presupuesto 2025 de México, presentado el 15 de noviembre, mostraba un recorte del déficit y una consolidación fiscal en el mediano plazo, en línea con las expectativas de muchos analistas.
• Moody's cambió la perspectiva de la calificación crediticia de México a negativa (de Baa2 a perspectiva negativa, con una probabilidad del 66% de bajar a Baa3 en los próximos 12-18 meses) el 14 de noviembre, un día antes de la presentación del presupuesto.

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• El autor cuestiona la decisión de Moody's de no esperar a la presentación del presupuesto para cambiar la perspectiva.
• Se argumenta que la decisión de Moody's se basa en la percepción de un debilitamiento en la gobernanza y el estado de derecho en México, factores que pesan mucho en las calificaciones crediticias, más allá de las métricas financieras.
• El autor concluye que, aunque la Secretaría de Hacienda cumplió con su promesa de consolidación fiscal, la percepción de deterioro en las instituciones y la gobernanza es un factor crucial que podría llevar a una rebaja en la calificación crediticia, independientemente de los números del presupuesto.
• Se espera que S&P y Fitch emitan sus propias evaluaciones en los próximos días, y se anticipa que la gobernanza y el estado de derecho serán factores clave en sus decisiones.

Conclusión:

El texto de Luis Gonzalí destaca la importancia de factores no financieros, como la gobernanza y el estado de derecho, en la determinación de la calificación crediticia de un país. La decisión de Moody's sirve como un ejemplo de cómo la percepción de debilidad institucional puede afectar la calificación crediticia, incluso con una sólida consolidación fiscal. El autor advierte que, a menos que se aborden estos problemas, la calificación crediticia de México podría seguir deteriorándose.