¿Por qué la mayoría de los proyectos terminan retrasados y con sobrecostos? ¿Se puede evitar?

Introducción

Este texto, escrito por Luis Miguel Arroyo Yllanes, miembro del Comité de Gerencia de Proyectos del Colegio de Ingenieros Civiles de México (CICM), analiza las causas de los retrasos y sobrecostos en los proyectos, especialmente en el ámbito de la construcción. El texto se basa en la definición de proyecto del Project Management Institute y en la importancia de las tres restricciones clave: alcance, cronograma y presupuesto.

Resumen

• Definición de proyecto: Un proyecto es un esfuerzo temporal para crear un producto, servicio o resultado único, con un inicio y un fin definido.
• Ciclo de vida del proyecto: Los proyectos atraviesan diferentes fases, como factibilidad, diseño, contratación, construcción y entrega.
• Triple restricción: El alcance, el cronograma y el presupuesto están interrelacionados. Un cambio en una variable impacta las otras dos.

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• Fase de estudios de factibilidad: Se establece un alcance inicial y se evalúa la viabilidad técnico-económica del proyecto.
• Fase de diseño: Se define el alcance detallado, se evalúa el presupuesto y el cronograma. Es crucial dedicar tiempo y recursos al diseño para evitar errores y subvaluaciones que impactan la ejecución.
• Fase de contratación: Se establecen los precios y contratos con los contratistas. Un diseño completo facilita acuerdos definitivos y limita variaciones potenciales.
• Fase de ejecución: Se realizan las actividades y se construyen los entregables. Es fundamental evitar cambios de alcance para no incurrir en sobrecostos y retrasos.
• Control de cambios: Un sistema robusto de control de cambios ayuda a minimizar los cambios no benéficos para el proyecto.
• Importancia del diseño: Un diseño adecuado es fundamental para minimizar las desviaciones de alcance, tiempo y costo.

Conclusión

El texto destaca la importancia de un diseño completo y bien desarrollado para minimizar las desviaciones de alcance, tiempo y costo en los proyectos. Se enfatiza la necesidad de dedicar tiempo y recursos al diseño, evitando la tendencia a acelerar el proceso en aras de ahorrar tiempo. Un diseño adecuado facilita la gestión de los proyectos, reduce la incertidumbre y minimiza los riesgos de sobrecostos y retrasos.