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El texto analiza el conflicto ruso-ucraniano en el contexto de la guerra moderna, destacando el uso de tecnología y la influencia de factores inesperados como la plaga de roedores.

Resumen

• El conflicto ruso-ucraniano se caracteriza por el uso intensivo de tecnología, incluyendo drones, imágenes satelitales y herramientas de geolocalización, pero también presenta similitudes con la Primera Guerra Mundial en términos de ganancias territoriales y bajas.
• Amy Zegart, catedrática de la Universidad de Stanford y autora del libro "Spies, Lies, and Algorithms: The History and Future of American Intelligence", destaca el papel de Twitter y otras plataformas digitales en la difusión de información sobre el conflicto.
• A pesar de la tecnología avanzada, el conflicto se desarrolla en un escenario similar a la "tierra de nadie" con trincheras, fortificaciones y fuertes defensas.
• El avance ucraniano en el óblast de Kursk ha sido significativo, pero también arriesgado, ya que podría desviar fuerzas ucranianas de otras zonas.
• Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, ha reconocido la intensificación de la presión militar rusa en Donetsk.
• La guerra ha impulsado el desarrollo de drones autónomos y armas robóticas de bajo coste en Ucrania, convirtiéndola en un "Silicon Valley de drones autónomos".
• Paul Mozur y Adam Satariano, reporteros de The New York Times, documentan la proliferación de "fábricas y laboratorios improvisados" en Ucrania que desarrollan tecnología militar.
• La plaga de roedores en las trincheras representa un problema adicional para ambos bandos, afectando el funcionamiento de los equipos y la salud de los soldados.
• La "fiebre de ratón", una enfermedad transmitida por roedores, ha afectado a unidades rusas en la región de Kharkiv.
• El conflicto ruso-ucraniano se desarrolla en un contexto complejo, donde la tecnología, la estrategia militar y factores inesperados como la plaga de roedores juegan un papel crucial.