Adiós Andy, ¿hola Harfuch?

Este texto de Azucena Uresti, publicado el 21 de agosto de 2025 en El Universal, analiza el panorama político dentro de la 4T y las posibles figuras que podrían suceder a Andrés Manuel López Obrador en el futuro, destacando el desgaste de algunos nombres que parecían seguros y el surgimiento de otros.

El apellido López ya no garantiza la herencia del poder dentro de la 4T.

📝 Puntos clave

• El apellido López, específicamente Andy López Beltrán, ha perdido fuerza debido a su imagen de opulencia, contraria al discurso de austeridad de su padre, AMLO.
• Adán Augusto López enfrenta cuestionamientos por su gestión en Tabasco y su cercanía a figuras controvertidas, lo que dificulta su aceptación dentro del movimiento.

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• Gerardo Fernández Noroña sigue siendo una figura polémica y divisiva, lo que limita su potencial.
• Marcelo Ebrard es visto como un funcionario eficiente, pero su relación con Claudia Sheinbaum y sus desafíos internos generan incertidumbre sobre su futuro.
• Omar García Harfuch emerge como una figura con alta aceptación social y una imagen de eficacia, aunque enfrenta la desconfianza de López Obrador.
• El texto concluye que la política mexicana premia a quienes mejor encarnan la narrativa del momento, y que el momento actual exige figuras que superen la sombra de AMLO.

Lo malo y lo bueno 👎👍

¿Qué aspectos negativos se pueden identificar en el análisis de Azucena Uresti sobre el futuro de la 4T?

La principal crítica implícita es la persistencia de prácticas políticas tradicionales, como el nepotismo y la lealtad por encima de la capacidad, incluso dentro de un movimiento que se autodenomina transformador. La desconfianza de López Obrador hacia figuras como García Harfuch, a pesar de su popularidad, sugiere que la ideología y la lealtad personal siguen siendo factores determinantes.

¿Qué aspectos positivos se pueden destacar en el análisis de Azucena Uresti sobre el futuro de la 4T?

El surgimiento de figuras como Omar García Harfuch, con una imagen de eficacia y aceptación social, sugiere la posibilidad de una renovación dentro de la 4T. La idea de que el apellido López ya no garantiza la herencia del poder abre la puerta a perfiles más diversos y a una competencia más abierta por el liderazgo.