Libre para jugar, libre para ser

El texto de Columna Invitada del 9 de Julio de 2025 reflexiona sobre la importancia del juego en la infancia y cómo el sistema actual limita el tiempo que los padres pueden dedicar a esta actividad con sus hijos. La autora, Martha Pereira Moncayo, Coordinadora de Investigación en Mexicanos Primero Jalisco, invita a aprovechar las vacaciones de verano para fortalecer los vínculos familiares a través del juego.

El juego compartido entre padres e hijos fomenta la autoestima, la agencia y la independencia en los niños.

📝 Puntos clave

• El juego es fundamental para el aprendizaje, el desarrollo cognitivo y la construcción de la moral en los niños.
• Estudios de Cambridge -Lego Foundation (2020) y Yangzom et al. (2025) respaldan los beneficios del juego en el desarrollo infantil.

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• La Encuesta Nacional de Uso del Tiempo (ENUT) revela que los padres mexicanos dedican significativamente menos tiempo al cuidado de sus hijos que las madres.
• El sistema actual, con sus exigencias laborales y otras responsabilidades, restringe el tiempo disponible para el juego en familia.
• Las vacaciones de verano ofrecen una oportunidad para fomentar el juego libre y fortalecer los vínculos familiares.
• La autora invita a construir un sistema que priorice el bienestar, el juego y el amor compartido.

Lo malo y lo bueno 👎👍

¿Qué aspectos negativos se señalan en el texto sobre la situación actual del juego en familia?

La principal crítica es la falta de tiempo que los padres pueden dedicar al juego con sus hijos debido a las exigencias del sistema laboral y otras responsabilidades. Las cifras de la ENUT evidencian una disparidad significativa en el tiempo dedicado al cuidado de los hijos entre padres y madres, lo que limita las oportunidades de juego y conexión familiar.

¿Qué aspectos positivos se resaltan en el texto y qué soluciones se proponen?

El texto destaca los múltiples beneficios del juego en el desarrollo infantil y la importancia de fortalecer los vínculos familiares a través de esta actividad. Se propone aprovechar las vacaciones de verano como una oportunidad para dedicar tiempo al juego libre y no estructurado. Además, se invita a reflexionar sobre la necesidad de construir un sistema que priorice el bienestar, el juego y el amor compartido, fomentando el apoyo mutuo y el entendimiento.