Este texto del Colegio de Ingenieros Civiles de México, fechado el 8 de diciembre de 2024, propone una nueva estrategia para la gestión de la infraestructura en México, priorizando la alineación con los objetivos nacionales y la optimización de recursos. Se argumenta que una planificación eficiente de la infraestructura es crucial para el desarrollo social, económico y cultural del país.
Resumen:
Se plantea una nueva metodología para la asignación de recursos a la infraestructura, priorizando la contribución al modelo de país deseado y la disponibilidad de financiamiento (público, privado o mixto).
Se propone un cambio en el tamaño de los proyectos, favoreciendo proyectos pequeños y medianos para una ejecución más eficiente y con menor riesgo de corrupción.
Se establece una secuencia de prioridades:
Mantenimiento y rehabilitación de la infraestructura existente, incluyendo auditorías y eliminación de infraestructura obsoleta.
Infraestructura que impulsa los ejes económico y competitivo, con enfoque en la globalización y la conectividad regional (carreteras, ferrocarriles, puertos, aeropuertos, etc.), promoviendo la inversión público-privada.
Infraestructura que promueve la equidad e inclusión social, con acceso a servicios básicos (agua, electricidad, saneamiento, educación, salud, vivienda) en todas las regiones, especialmente en zonas rurales y marginadas.
Infraestructura enfocada en la sostenibilidad ambiental (infraestructura verde, energías renovables), la innovación tecnológica (redes de telecomunicaciones, centros de innovación) y la participación ciudadana (espacios públicos, infraestructura para la justicia social).
Se sugiere el uso de tecnologías como la IA (Inteligencia Artificial), el Big Data, los GIS (Sistemas de Información Geográfica) y los modelos de simulación y gemelos digitales para optimizar la asignación de recursos y la evaluación del impacto de las inversiones en infraestructura.
Conclusión:
La propuesta del Colegio de Ingenieros Civiles de México ofrece una visión integral para la gestión de la infraestructura en México, buscando la eficiencia, la equidad y la sostenibilidad.
La implementación de esta nueva estrategia requiere la adopción de tecnologías avanzadas y una voluntad política para priorizar la planificación a largo plazo.
El éxito de la propuesta depende de la disposición a explorar nuevas formas de gestión presupuestaria y la colaboración entre el sector público y privado.