Este texto de Manuel J. Jáuregui, publicado el 4 de diciembre de 2024 en REFORMA, analiza la situación de inseguridad en Sinaloa, México, contrastando las declaraciones oficiales sobre los logros en materia de seguridad con la realidad percibida por los empresarios de la región. El autor critica la ineficacia del gobierno federal y estatal para frenar la violencia, a pesar de la presencia militar.
Resumen:
Representantes de Coparmex, Canacintra y el Colegio de Economistas de Sinaloa informaron a senadores sobre pérdidas económicas de 18 mil millones de pesos (3.5% del PIB estatal) debido a la narcoguerra entre "Los Mayitos" y "Los Chapitos".
La violencia ha generado el cierre de escuelas y negocios, impactando la nómina de empleados y creando un "estado de excepción" en Sinaloa.
Los empresarios solicitaron apoyo económico para mitigar el daño, sin pedir la destitución del gobernador Rocha Moya.
El autor critica la incapacidad del gobierno federal para frenar la violencia en Culiacán, Mazatlán y otras ciudades de Sinaloa, así como en otros estados como Nuevo León (San Pedro).
Se cuestiona la estrategia oficial de minimizar la violencia, como se evidenció en la respuesta oficial a la explosión de un coche, atribuida a un dron en lugar de un coche bomba.
Se critica la ineficacia de la estrategia de seguridad del gobierno federal, incluso con la presencia militar en Sinaloa, tras el secuestro de El Mayo Zambada.
Se destaca la detención de funcionarios aliados con el crimen organizado en el Estado de México, pero la poca efectividad en Sinaloa.
Conclusión:
La violencia en México persiste a pesar de las declaraciones oficiales.
El gobierno prioriza la percepción de la seguridad sobre la realidad.
La falta de efectividad gubernamental genera desesperanza y zozobra en la población.
La impunidad de los capos del narcotráfico es un factor clave en la persistencia de la violencia.
