Este texto de Alberto Aguirre, escrito el 4 de diciembre de 2024, analiza la implementación del nuevo tratado comercial de América del Norte (T-MEC) en México, particularmente en lo referente a la reforma laboral y sus consecuencias. Se centra en el mecanismo de respuesta rápida, su efectividad y los desafíos que enfrenta, además de tocar las implicaciones en otros sectores como el editorial.
Resumen:
La implementación del mecanismo de respuesta rápida del T-MEC, considerada la innovación más llamativa por Sandra Polaski (directora adjunta de la OIT), fue frecuentemente utilizada durante la gestión de Luisa María Alcalde en la Secretaría del Trabajo y Previsión Social de México.
Katherine Tai, representante comercial de la administración Biden, elogió la implementación del mecanismo. La Confederación Europea de Sindicatos propone su adopción en la UE.
La administración de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) tuvo una estrecha relación con líderes sindicales como Napoleón Gómez Urrutia, Alfonso Cepeda Salas, y Pedro Haces, y con el abogado laboralista Arturo Alcalde Justiniani y su esposa, Bertha Elena Luján Uranga.
AMLO cumplió parcialmente con la promesa de designación democrática de dirigentes sindicales, con la participación del INE y el Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje (bajo la dirección de Plácido Morales Vázquez), pero excluyendo al SNTE.
El mecanismo de respuesta rápida presenta un déficit en su implementación, con investigaciones menos exhaustivas por parte de las autoridades mexicanas que sus contrapartes estadounidenses. Se negaron a aplicarlo en casos como Tridonex y Grupo México, argumentando que las violaciones ocurrieron antes de la entrada en vigor del T-MEC.
La reforma laboral no tiene efectos retroactivos, dejando fuera del mecanismo los conflictos laborales iniciados antes de julio de 2020.
La renegociación del T-MEC deberá abordar el uso del mecanismo de respuesta rápida. Desmontar el corporativismo y clientelismo sindical sigue siendo un objetivo pendiente.
La reducción del 80% en la compra de libros de texto para secundaria por parte del gobierno, comparado con 2022, ha impactado negativamente a los editores educativos, según un estudio encargado por la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana y advertido por Hugo Setzer, presidente del gremio.
Conclusión:
La implementación del T-MEC en México ha tenido avances y retrocesos en materia laboral.
El mecanismo de respuesta rápida, si bien innovador, enfrenta desafíos en su aplicación y alcance.
La reforma laboral, aunque con logros, no ha resuelto completamente problemas de fondo como el corporativismo sindical.
La reducción del gasto gubernamental en libros de texto ha generado consecuencias negativas en el sector editorial.