Este texto, escrito por Rafael Cue el 3 de Diciembre de 2024, es una reflexión sobre una corrida de toros en la Plaza México, analizando las actuaciones de varios toreros y la importancia de la calidad del toro para el éxito de la fiesta brava. También aborda la responsabilidad de todos los involucrados en mantener la integridad y la belleza del toreo.
Resumen:
Se describe el toreo lento como un ejercicio sublime del alma, destacando la armonía entre el torero y el toro.
Se elogia la torería de Juan Ortega, un matador sevillano, por su equilibrio y naturalidad, comparando su actuación a un romance entre el torero y el público de México.
Se destaca la capacidad de Juan Pablo Sánchez para templar a los toros, incluso a aquellos que no son excelentes, logrando una faena de triunfo. Se menciona que cortó una oreja.
Se menciona la mala suerte de Diego Silveti con sus toros, resaltando la dureza del toreo.
Cue enfatiza la importancia de la calidad del toro, su presentación y juego, para el éxito de la corrida, criticando la posibilidad de toros de baja calidad en la Plaza México.
Se recalca la responsabilidad de todos los involucrados en la fiesta brava para mantener su integridad y no defraudar al público que invierte tiempo y dinero en asistir.
Se finaliza con una defensa del toreo frente a los antitaurinos, invitándolos a enfocarse en otras causas.
Conclusión:
El texto defiende la belleza y la importancia del toreo lento y la responsabilidad de todos los participantes en la fiesta brava.
Se destaca la importancia de la calidad del toro para el éxito de la corrida.
Se hace un llamado a la seriedad y responsabilidad para preservar la tradición taurina.
Se rechaza la crítica antitaurina, proponiendo que se enfoquen en otras causas.