Este texto de Juan Gómez Junco, escrito el 21 de diciembre de 2024, analiza la importancia sobrevalorada de los directores técnicos en el fútbol, cuestionando la frecuencia con la que son despedidos y contratados, independientemente de su desempeño real. El autor utiliza ejemplos de equipos mexicanos como Toluca, Monterrey, Santos y América, para ilustrar su argumento.
Resumen:
El autor argumenta que la función principal de un director técnico es "no estorbar".
Se cuestiona el impacto de los entrenadores en el éxito de jugadores como Maradona y Messi.
Se critica el despido del entrenador de Toluca a pesar de su segundo lugar en la tabla general.
Se menciona la contratación de Mohamed por Toluca y la de Fernando Ortiz por Santos, como ejemplos de cambios frecuentes y cuestionables.
Se destaca el éxito del América con Jardine, atribuido al apoyo económico y no necesariamente a la capacidad del entrenador.
Se plantea que la clave del éxito reside en la calidad del presupuesto, el plantel, la infraestructura y las decisiones, no solo en el entrenador.
Se critica la rotación constante de entrenadores como un desperdicio de dinero y tiempo.
Se concluye que el valor de un entrenador es efímero, dependiendo más de las circunstancias que de su habilidad.
Se afirma que un entrenador, sin importar su capacidad, no puede obtener buenos resultados si no cuenta con jugadores de calidad.
Conclusión:
La importancia del director técnico en el fútbol está sobrevalorada.
El éxito de un equipo depende más de factores como el presupuesto, el plantel y la infraestructura que de la capacidad del entrenador.
La constante rotación de entrenadores es una práctica ineficiente y costosa.
La calidad de los jugadores es fundamental para el éxito de un equipo, independientemente del entrenador.
