El texto de Manuel Sánchez González, escrito el 18 de diciembre de 2024, analiza la divergencia entre la confianza de los productores y la de los consumidores en la economía mexicana, contrastando las perspectivas a corto y largo plazo. Se basa en datos del INEGI y del Banco de México, analizando indicadores de confianza empresarial y del consumidor.

Resumen:

  • Los indicadores de confianza empresarial del INEGI, basados en encuestas a cinco componentes, muestran una tendencia a la baja desde septiembre de 2024, especialmente en la construcción, servicios privados no financieros, comercio y manufacturas. El indicador global se encuentra cerca de la zona de contracción.
  • La disminución de la confianza empresarial se refleja en la menor disposición a invertir, coincidiendo con la ralentización del PIB desde el cuarto trimestre de 2023.
  • Contrariamente, el indicador de confianza del consumidor, elaborado conjuntamente por el INEGI y el Banco de México, ha aumentado desde 2023, superando niveles históricos y alcanzando un máximo en octubre de 2024.
  • El aumento de la confianza del consumidor se relaciona con la fortaleza del mercado laboral, incrementos salariales reales, aumento de la población ocupada y tasas de desempleo bajas.
  • La discrepancia entre la confianza de productores y consumidores se atribuye, en parte, a las transferencias monetarias del gobierno y al aumento del salario mínimo, que han impulsado el consumo y redistribuido el ingreso. En el segundo trimestre de 2024, la remuneración de los asalariados representó el 28.5% del PIB.
  • El autor cuestiona la sostenibilidad de esta discrepancia, sugiriendo que, a largo plazo, y sin un desequilibrio fiscal e inflación creciente, la diferencia tenderá a desaparecer.
  • Se advierte sobre un posible ajuste en el mercado laboral debido al estancamiento de la productividad y al aumento del costo laboral por unidad producida. El aumento de la subocupación y la caída del indicador global de personal ocupado en 2024 podrían indicar el inicio de este ajuste.
  • Se concluye que el aumento de la productividad es fundamental para el crecimiento económico sostenible y que la política económica debería orientarse hacia este objetivo.

Conclusión:

  • La divergencia entre la confianza de productores y consumidores refleja una realidad económica compleja.
  • La sostenibilidad del actual escenario depende de factores como la inflación, el equilibrio fiscal y, sobre todo, el aumento de la productividad.
  • Se recomienda una política económica enfocada en el incremento de la productividad para un crecimiento económico sostenible y beneficioso para todos.
Sección: Economía

 Este análisis con resumen se realiza con IA (🤖) y puede tener imprecisiones. leer el texto original 📑