El texto de Alfredo Campos Villeda, escrito el 14 de diciembre de 2024, explora las opiniones de diversos autores sobre el impacto de las nuevas tecnologías, particularmente la inteligencia artificial, en la creación literaria. El autor presenta un panorama de perspectivas que, a pesar de sus matices, coinciden en un punto central.
Resumen:
El texto parte de una entrevista con el escritor rumano Mircea Cărtărescu, quien expresó preocupación por el "retiro de la gente al metaverso".
Pascal Quignard, escritor francés, considera que el arte, basado en las emociones, no se ve amenazado por la tecnología.
Abdulrazak Gurnah, escritor tanzano-británico, comparte la opinión de que las nuevas interfaces no representan un peligro para la creación literaria.
Las escritoras españolas Pilar Adón y María Sánchez también se muestran confiadas en que la inteligencia artificial no amenaza la creación literaria.
El consenso general es aprovechar las ventajas de las nuevas tecnologías sin caer en escenarios distópicos.
Se destaca la rapidez y precisión de la inteligencia artificial, pero se enfatiza la importancia del criterio, la idea inmediata y la improvisación en la creación artística, elementos que la IA no posee.
Se cita a Milan Kundera y su apreciación del jazz como un arte de improvisación, contrastándolo con la naturaleza de la inteligencia artificial.
Conclusión:
El texto presenta un optimismo moderado respecto al futuro de la creación literaria en la era de la inteligencia artificial.
Se reconoce la potencia de la IA como herramienta, pero se subraya la irreductibilidad de la creatividad humana, especialmente en aspectos como la improvisación y el criterio.
La opinión de varios autores consultados converge en la idea de que la inteligencia artificial no representa una amenaza existencial para la creación literaria, sino una herramienta con potencial.
