Este texto, escrito por Rafael Lozano el 13 de noviembre de 2024, analiza la Estadística de Defunciones Registradas (EDR) en México para el año 2023, publicada por el INEGI (Instituto Nacional de Geografía e Informática). El autor evalúa la calidad de los datos considerando la oportunidad y la precisión, destacando las áreas de mejora en el sistema de registro de defunciones.
Resumen:
El INEGI publicó la EDR 2023 con un rezago de 10 meses, lo cual, considerando la magnitud de los datos, es competitivo a nivel mundial (alta oportunidad). Sin embargo, la precisión de los datos presenta deficiencias.
La recopilación de datos involucra al INEGI, la Secretaría de Gobernación, la Fiscalía General de Justicia del Estado (a través del SEMEFO), y la Secretaría de Salud (a través de la Dirección General de Información en Salud y el Centro Colaborador de la Clasificación de Enfermedades).
Se registraron 799,869 defunciones en 2023, pero solo 779,239 (97.4%) ocurrieron en ese año. El resto corresponde a años anteriores, lo que afecta la precisión de las fechas de defunción. Se estima que la mejor aproximación al total de defunciones ocurridas se encuentra en los datos de 2021.
Se registraron 3,393 defunciones (0.44% del total) con edad desconocida. El 55% de estas defunciones fueron homicidios. En Baja California se observa el mayor desconocimiento de la edad en homicidios (26.5%). En 15% de los homicidios con edad desconocida, también se desconoce el lugar de la muerte.
El 95% de los homicidios fueron certificados por médicos forenses, pero en 1,951 casos se desconoce la edad, a pesar de la autopsia y la investigación policial. Esto cuestiona la efectividad de la confrontación de datos entre INEGI y SSA.
La imprecisión en la edad de las defunciones, especialmente en homicidios, afecta la construcción de indicadores de salud y la asignación de recursos.
Se propone mejorar los sistemas de recolección y registro de datos, utilizando modelos estandarizados de validación con fuentes como la CURP o el registro de nacimientos. La digitalización de los sistemas de información en la Secretaría de Salud puede contribuir a la mejora.
Se concluye que la oportunidad en los reportes del INEGI es buena, pero la precisión requiere mejoras significativas, especialmente en áreas rurales y con poblaciones vulnerables. Se necesitan mejoras en la cobertura, accesibilidad, confiabilidad y pertinencia de los datos.
Conclusión:
El análisis de Lozano revela que si bien el INEGI cumple con la oportunidad en la publicación de la EDR, la precisión de los datos presenta importantes deficiencias, particularmente en el registro de la edad en las defunciones, especialmente en casos de homicidio. Se requieren acciones coordinadas entre las diferentes instituciones involucradas para mejorar la calidad de los datos y fortalecer el sistema de estadísticas vitales en México. La digitalización y la estandarización de los procesos son cruciales para alcanzar este objetivo.
