Estados Unidos no puede decir no a la política industrial

El texto, escrito por un autor anónimo el 18 de septiembre de 2024, analiza la evolución de la política industrial en Estados Unidos desde finales de los años 70 hasta la actualidad. El autor argumenta que, a pesar de la prevalencia del neoliberalismo en esa época, la política industrial se ha vuelto inevitable en el contexto actual.

Resumen

• A finales de los años 70, la economía estadounidense enfrentaba problemas como la inflación, la disminución del crecimiento de la productividad y la incapacidad para afrontar las perturbaciones geopolíticas y geoeconómicas.
• Se propusieron dos soluciones: el neoliberalismo y la política industrial activa. El neoliberalismo, que abogaba por la reducción del Estado, la desregulación y la aceptación de la desigualdad económica, ganó la batalla.

• Publicidad
• El autor argumenta que el neoliberalismo fue un fracaso, ya que no logró revitalizar la empresa privada ni motivar a los creadores de empleo.
• La política industrial activa, por otro lado, fue descartada debido a la creencia de que el Estado no tenía la capacidad para llevarla a cabo.
• El autor cita a Charles L. Schultze, expresidente del Consejo de Asesores Económicos de la Casa Blanca, quien argumentó que el Estado no podía elegir por adelantado una combinación industrial ganadora y que la intervención estatal en la economía sería dañina.
• El autor también menciona a la senadora Barbara Boxer, quien admitió que el proyecto del bombardero B-2 tenía una gran capacidad de "payroll" (nómina salarial) en lugar de "payload" (carga útil), lo que refleja la corrupción y la falta de interés público en las decisiones gubernamentales.

Conclusión

El texto concluye que, a pesar de los argumentos en contra de la política industrial activa, la situación actual exige una intervención estatal en la economía. El autor sugiere que el Estado debe desempeñar un papel más activo en la creación y el apoyo a las industrias, especialmente en el contexto de la creciente desigualdad económica y la necesidad de abordar los desafíos geopolíticos y geoeconómicos.