El texto de Maribel Ramírez Coronel del 17 de septiembre de 2024 analiza la situación del sistema de salud mexicano en la transición de gobierno, centrándose en las deudas heredadas por el Insabi y la responsabilidad del nuevo organismo IMSS Bienestar.
Resumen
El equipo entrante, liderado por David Kershenobich, próximo secretario de Salud, deberá revisar con cuidado la situación del sistema de salud, que contrasta con la imagen positiva que ha presentado el gobierno saliente.
El IMSS Bienestar hereda una deuda multimillonaria del Insabi, que asciende a unos 10,000 millones de pesos.
La deuda corresponde a compras de medicamentos realizadas entre 2021 y 2023, a pesar de que se contaba con recursos presupuestados para dichas compras.
Alejandro Calderón Alipi, ex coordinador nacional de Abastecimiento y Distribución de Medicamentos en el Insabi, no logró ordenar los pagos y dejó un registro poco claro.
Alejandro Svach, próximo director general del IMSS Bienestar, tendrá la responsabilidad de gestionar la deuda y asegurar el respaldo del secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
La transición del IMSS Bienestar se ve afectada por la falta de un comisionado federal del regulador sanitario, lo que retrasa la transición.
El nuevo organismo enfrenta un reto importante al iniciar con una deuda significativa, lo que podría afectar su funcionamiento.
Se espera que la nueva administración, liderada por Claudia Sheinbaum, adopte un enfoque más responsable y transparente en comparación con el gobierno saliente.
Conclusión
El texto destaca la complejidad de la situación del sistema de salud mexicano en la transición de gobierno. La deuda heredada por el Insabi representa un obstáculo importante para el IMSS Bienestar, y la falta de transparencia en la gestión de los recursos públicos genera preocupación. La nueva administración tendrá que afrontar este desafío y buscar soluciones para garantizar la atención médica de la población sin seguridad social.
