El texto analiza la brecha digital en la educación y sus consecuencias para el desarrollo económico global. El autor argumenta que la falta de acceso a tecnologías digitales en la educación está creando una desigualdad que amenaza con ralentizar el crecimiento económico, especialmente en los países en desarrollo.
Resumen
La UNESCO estima que más de 1,500 millones de estudiantes en 190 países se vieron afectados por el cierre de escuelas durante la pandemia de COVID-19 en 2020, y la falta de acceso a tecnologías digitales agravó las desigualdades preexistentes.
El Banco Mundial reporta que el 43% de los hogares en países en desarrollo carecen de acceso a internet. En África Subsahariana, solo el 28% de la población tiene acceso a la red, mientras que en América Latina, aunque el porcentaje asciende al 67%, las disparidades entre áreas urbanas y rurales son alarmantes.
Un estudio del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) de 2023 reveló que solo el 44% de los hogares rurales en México tiene acceso a internet, comparado con el 76% en áreas urbanas.
En América Latina, se estima que solo el 30% de los estudiantes de educación secundaria reciben algún tipo de educación en TIC (Tecnologías de la Información y la Comunicación), según un informe de la CEPAL de 2022. En contraste, en Europa y América del Norte, esta cifra supera el 85%.
Un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) de 2023, sugiere que cerrar la brecha digital podría aumentar el PIB global en un 1,5% en la próxima década.
En India, el gobierno lanzó el programa Digital India en 2015, con el objetivo de mejorar la infraestructura digital y expandir el acceso a la educación en línea. Sin embargo, el 60% de los estudiantes rurales aún carecen de acceso a recursos educativos digitales.
Conclusión
El autor concluye que la brecha digital en la educación es uno de los desafíos más urgentes que enfrenta la economía global en la era del conocimiento. Se necesitan medidas decisivas para cerrar esta brecha, no solo para garantizar la equidad, sino también para impulsar el desarrollo económico.
