“Señalado por la muerte”: “Trainspotting” y el último 'chute'

El texto es una crítica del libro "Señalado por la muerte" ("Dead Men’s Troussers") del escritor escocés Irvine Welsh, publicado en 2024. El autor del texto, Wenceslao Bruciaga, analiza la obra desde una perspectiva personal, reflexionando sobre la decisión de Welsh de continuar la historia de los personajes de "Trainspotting" y su evolución a lo largo de los años.

Resumen

• Bruciaga considera que la novela es una carta de despedida a los lectores y a Edimburgo, ciudad que ha sido escenario de la mayoría de las obras de Welsh.
• La novela presenta a los personajes de "Trainspotting" en la actualidad, mostrando cómo han envejecido y cómo sus vidas se han visto afectadas por sus decisiones pasadas.

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• Renton se ha convertido en un DJ, Sick Boy sigue en el negocio de la prostitución, Spud es un indigente y Begbie ha encontrado el éxito como artista contemporáneo.
• La novela también incluye personajes de otras obras de Welsh, como la pandilla de "Glue".
• Bruciaga destaca el estilo característico de Welsh, con su uso del slang escocés, la violencia, la misoginia, la vulgaridad y la crítica social.
• El autor considera que la novela es un ensayo pesimista sobre el costo de vivir, mostrando cómo la amistad, el amor y la familia pueden verse afectados por la adicción, la ambición y la manipulación.
• Bruciaga concluye que la novela es una reflexión sobre la vejez y la dificultad de cambiar los defectos de la personalidad, incluso con el paso del tiempo.
• La novela es una continuación de la historia de "Trainspotting", que podría considerarse una tetralogía sobre la heroína.
• Bruciaga compara la novela con "Porno", otra obra de Welsh, destacando que mientras que "Porno" se centraba en las consecuencias de las decisiones, "Señalado por la muerte" se centra en la vejez.
• El autor considera que la novela es un testamento cruel sobre la naturaleza humana, mostrando que las personas no cambian sus defectos a pesar de los intentos de autoengaño.
• Bruciaga concluye que los personajes de "Trainspotting" siguen siendo los mismos desgraciados de hace 30 años, a pesar de sus intentos de cambiar sus vidas.