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El texto de Felipe Ávila, fechado el 20 de Marzo del 2025, analiza la situación de los migrantes en México, destacando la vulnerabilidad a la que se enfrentan y la importancia de las redes de solidaridad que les brindan apoyo. Se centra en el caso de la Casa del Migrante San Agustín como ejemplo de estas redes.

Un dato importante es el ingreso de entre 70 y 100 millones de dólares que representan los migrantes para los grupos criminales tan sólo en el estado de Chihuahua.

Resumen

• México es un país de tránsito para migrantes que buscan llegar a Estados Unidos, enfrentando riesgos y vulnerabilidad.
• Los grupos criminales obtienen ganancias significativas de la migración, estimadas entre 70 y 100 millones de dólares solo en Chihuahua.
• Las redes de solidaridad, como Las Patronas y la Pastoral de la Movilidad de la Iglesia Católica, son cruciales para apoyar a los migrantes.
• La Casa del Migrante San Agustín, parte de la Pastoral de la Movilidad, ha atendido a 30 mil 835 personas desde 2019, ofreciendo refugio y asistencia.
• La Casa San Agustín se sostiene gracias al trabajo voluntario, donaciones y, ocasionalmente, apoyos de organismos internacionales como la OIM, aunque estos se han visto afectados por la suspensión de la ayuda humanitaria estadounidense.
• La solidaridad se manifiesta en diversas formas, desde ayuda monetaria hasta alojamiento, ropa, atención médica y oportunidades de empleo.
• El texto recuerda el trágico deceso de 40 personas en mayo de 2023 en la sede del Instituto Nacional de Migración en Ciudad Juárez, contrastándolo con la labor de la Casa del Migrante San Agustín como un espacio de esperanza.
• Se proporciona información de contacto para quienes deseen apoyar la labor de la Casa del Migrante San Agustín.
• Irina Córdoba Ramírez, del Instituto de Investigaciones Históricas, UNAM, y Ariel Mojica Madrigal, del Centro de Estudios Rurales, El Colegio de Michoacán, forman parte del consejo de la Casa del Migrante San Agustín.

Conclusión

• El texto subraya la importancia de la solidaridad y el apoyo de la sociedad civil para mitigar los riesgos que enfrentan los migrantes en México.
• La Casa del Migrante San Agustín se presenta como un ejemplo concreto de cómo la empatía y el trabajo en red pueden marcar la diferencia en la vida de las personas en movilidad.
• A pesar de los desafíos y la reducción de la ayuda internacional, la Casa San Agustín continúa operando gracias al compromiso de voluntarios y donantes, demostrando que la solidaridad trasciende fronteras.