Este texto de Carlos Mota, publicado el 2 de diciembre de 2024, analiza la reacción del sector ferroviario privado ante el ambicioso proyecto de trenes de pasajeros presentado por la Presidenta Claudia Sheinbaum. El artículo también toca brevemente la situación de las empresas chinas en los puertos mexicanos.
Resumen:
El sector ferroviario privado recibió positivamente el proyecto de Claudia Sheinbaum, viendo su viabilidad en zonas de alta densidad poblacional como México-Querétaro, Querétaro-Irapuato y Irapuato-Guadalajara.
Existe una buena disposición a colaborar con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), liderada por el Gral. Secretario Ricardo Trevilla, en la definición de rutas y construcción.
Se prevé una estrecha coordinación entre el sector privado y la Sedena, incluyendo el uso compartido de vías existentes, compra de nuevas vías y construcción de pasos dobles.
El proyecto supera en ambición al Tren Maya, incluyendo la construcción de 10 complejos de carga con terminales intermodales y patios operativos.
Se destacan dos rutas interurbanas para pasajeros: Ciudad de México-Nuevo Laredo y Ciudad de México-Nogales.
La construcción se realizará velozmente, gracias a la experiencia del equipo del Gral. Ricardo Vallejo (Sedena) y licitaciones de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), liderada por Jesús Esteva, comenzando por los tramos Querétaro-Irapuato y Saltillo-Nuevo Laredo (según Andrés Lajous, director de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario).
El Paquete Económico 2025 asignó $149 mil millones de pesos a proyectos ferroviarios prioritarios, con el Tren Maya y el México-Querétaro como principales beneficiarios.
Se menciona la preocupación en la industria automotriz por la práctica de empresas chinas que utilizan las zonas de descarga de los puertos para almacenamiento, a diferencia de empresas de Estados Unidos, Alemania y Japón que adquieren patios propios.
Conclusión:
El proyecto ferroviario de Sheinbaum representa una iniciativa de gran envergadura con alta probabilidad de éxito gracias a la colaboración público-privada y la eficiencia en la construcción.
La coordinación entre la Sedena, la SICT y el sector privado será crucial para la ejecución del proyecto.
La situación en los puertos mexicanos refleja una disparidad en las prácticas de las empresas internacionales, generando inquietud en el sector automotriz.