Este texto, escrito por Sergio E. Contreras Pérez, Presidente Ejecutivo de COMCE y Presidente del Consejo Empresarial de la Alianza del Pacífico (CEAP), el 19 de Diciembre de 2024, resume su participación en la XI Cumbre Empresarial de la Alianza del Pacífico en Santiago de Chile. El artículo analiza el estado actual de la Alianza del Pacífico y propone acciones para fortalecer su integración económica.
Resumen:
La XI Cumbre Empresarial de la Alianza del Pacífico (AP) en Santiago de Chile sirvió como plataforma para discutir el futuro del bloque.
La AP, más allá de un acuerdo comercial, busca la libre circulación de bienes, servicios, personas y capitales, similar al modelo de la Unión Europea.
La AP representa el 37.34% del PIB de América Latina y el Caribe, el 56.31% del comercio total de la región y el 39% de la inversión extranjera directa.
El CEAP, integrado por empresarios de Chile, Colombia, México y Perú, busca mejorar la integración económica y cooperación entre los países miembros.
Se propusieron cuatro iniciativas prioritarias:
Crear una Agencia de Economía Circular de la Alianza del Pacífico.
Impulsar la implementación de anexos de armonización regulatoria en sectores como aseo doméstico, dispositivos médicos, productos cosméticos y farmacéuticos, además de iniciar negociaciones en alimentos procesados y bebidas.
Aprovechar el nearshoring para atraer inversión extranjera, especialmente involucrando a las PYMEs.
Fomentar la colaboración público-privada en áreas como sostenibilidad, innovación y fortalecimiento de cadenas de valor.
Se celebró la adhesión de Costa Rica a la Alianza del Pacífico.
Se hizo un llamado a revitalizar las cumbres anuales entre el CEAP y los gobiernos, y a eliminar barreras comerciales intrarregionales.
Conclusión:
La Alianza del Pacífico tiene el potencial de ser un puente entre Asia-Pacífico y América Latina.
Se requiere un compromiso político renovado y una visión compartida entre los países miembros para lograr el éxito.
El sector empresarial seguirá impulsando iniciativas para un crecimiento económico sostenible y la prosperidad de las sociedades.
La XI Cumbre Empresarial demostró que el diálogo y la acción conjunta pueden construir una región más integrada, competitiva y resiliente.