Este texto de José Carreño Figueras, publicado el 11 de Diciembre de 2024, analiza las consecuencias de la caída del régimen de Bashar Al-Assad en Siria tras 53 años en el poder, y las complejas implicaciones geopolíticas que esto conlleva. El autor explora las tensiones entre los diversos grupos armados de oposición y las potencias extranjeras involucradas.
Resumen:
Caída del régimen de Bashar Al-Assad en Siria tras una ofensiva relámpago de grupos armados de oposición.
Complejas tensiones entre grupos milicianos: kurdos aliados con Estados Unidos, grupos vinculados con Arabia Saudita, y grupos yihadistas con raíces en el Estado Islámico.
Intereses extranacionales en juego: Rusia busca mantener sus bases militares, Turquía busca ampliar su influencia y contener a los kurdos, e Irán sufre una derrota estratégica al perder un aliado clave.
Posibilidad de liberación de presos políticos y regreso de millones de refugiados.
Hayat Tahrir al-Sham (HTS), liderada por Abu Mohammed Al-Golani, encabezó la ofensiva, pero enfrenta el desafío de gobernar una sociedad diversa. Se compara a Al-Golani con Kemal Ataturk por su pragmatismo, a pesar de sus raíces yihadistas.
Necesidad de flexibilidad política e ideológica por parte de kurdos y árabes sunitas para un gobierno interino inclusivo.
La analista política turca Asli Aydintasbas de la Institución Brookings, señala la falta de experiencia de los grupos de oposición en la gobernanza conjunta.
Conclusión:
La situación en Siria tras la caída de Assad es extremadamente compleja y delicada.
El éxito de la transición dependerá de la capacidad de los grupos de oposición para superar sus diferencias y lograr un gobierno inclusivo.
Las potencias extranjeras tendrán un papel crucial en la estabilización del país, aunque sus intereses pueden ser conflictivos.
El futuro de Siria permanece incierto, con importantes desafíos internos y externos por resolver.