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Este texto, escrito por Carla Humphrey el 12 de Noviembre de 2024, analiza los resultados de una investigación sobre la violencia electoral en México, realizada en el marco del Fondo de Apoyo a la Observación Electoral (FAOE) 2024, una iniciativa del Instituto Nacional Electoral (INE) y el Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH), presentada por el Colegio de México (Colmex). El texto destaca la gravedad del problema y propone recomendaciones para mitigarlo.

Resumen:

• La investigación del Colmex, financiada por el FAOE 2024, se centró en el "Monitoreo de Violencia contra Candidatos durante el Proceso Electoral 2023-2024".
• Los altos niveles de violencia electoral afectan la calidad de la democracia y la gobernabilidad en México, impactando a la mayoría de los estados y a todos los partidos políticos en todas las etapas del proceso electoral.
• La violencia electoral presenta cuatro características especiales (no detalladas en el resumen).
• La violencia influye en la capacidad de competir de los candidatos.
• Los partidos políticos no están enfrentando adecuadamente la violencia electoral, tolerando incluso la participación de organizaciones criminales.
• La violencia simbólica y digital contra las mujeres ha aumentado exponencialmente.
• Se recomiendan acciones de prevención, colaboración entre autoridades y partidos políticos, comunicación con candidatos en riesgo, creación de un mapa de riesgos, filtros más efectivos para la selección de candidatos y cursos de seguridad para candidatos.
• Se concluye que las autoridades estatales, electorales, partidos políticos y candidatos necesitan mayor seguridad, información y preparación para combatir la violencia electoral.
• El INE se compromete a inhibir este tipo de conductas que debilitan la participación ciudadana.

Conclusión:

El texto de Carla Humphrey resalta la urgencia de abordar la violencia electoral en México como un problema grave que afecta la democracia. Las recomendaciones presentadas, enfocadas en la prevención, la colaboración interinstitucional y la capacitación, ofrecen un punto de partida para mitigar este fenómeno y fortalecer la participación ciudadana en los procesos electorales. La autora, en su calidad de Consejera electoral del INE, refuerza el compromiso de la institución para combatir la violencia electoral.