El texto, escrito por Mario Melgar Adalid el 3 de Octubre del 2024, analiza la problemática del tráfico de fentanilo en la frontera entre México y Estados Unidos, y su impacto en la relación bilateral.
Resumen
Estados Unidos enfrenta dos problemas cruciales: la economía y la frontera. Ambos tienen repercusiones en México, ya que dependemos de su economía (80%) y ellos dependen de nuestra frontera (100%).
El tráfico de drogas, especialmente el fentanilo, es un problema complejo en la frontera. En 2023, 100 mil personas murieron en Estados Unidos por sobredosis de fentanilo.
Las estrategias para combatir la epidemia, tanto liberales como conservadoras, han sido ineficaces. Donald Trump culpa a los migrantes, mientras que Kamala Harris considera el fentanilo un azote y prioriza detener su flujo a Estados Unidos.
El fentanilo es una droga novedosa, fácil de producir, transportar y altamente adictiva y letal. Su bajo costo y fácil distribución lo convierten en un problema de salud pública.
El fentanilo llega a Estados Unidos vía México, lo que afecta la relación bilateral. Culpar a México por la epidemia es una solución fácil pero no resuelve el problema.
La solución requiere un esfuerzo conjunto: México debe dificultar la producción y coordinar estrategias con Estados Unidos.
Se ha descubierto que las "mulas" que transportan fentanilo por la frontera de Tijuana-San Ysidro son jóvenes estadounidenses, lo que facilita el contrabando.
México debe exigir a Estados Unidos que atienda la demanda y no solo el suministro. Se debe abordar la adicción como un problema sanitario.
Maia Szalavitz, experta en adicciones, propone la distribución masiva de naxolone, antídoto de las sobredosis de opioides, así como metadona y buprenorfina para reducir el riesgo de muerte.
La adicción se atribuye a la automedicación, la soledad, la desconexión social, los desórdenes psiquiátricos, los traumas y los problemas económicos.
La muerte por sobredosis de fentanilo va "en tándem con un profundo aumento de la inequidad de los ingresos".
Conclusión
El problema del fentanilo es un desafío bilateral que requiere una solución conjunta. Estados Unidos debe enfrentar la demanda y México debe dificultar el suministro. Se necesita una estrategia integral que aborde la adicción como un problema de salud pública y se centre en la prevención y el tratamiento.