El texto de Claudia Ivett Romero-Delgado, escrito el 28 de Octubre del 2024, explora el impacto del cáncer de mama más allá de la concientización, centrándose en las dimensiones financiera, social y económica de la enfermedad.
Resumen
Octubre se ha convertido en el mes de concientización sobre el cáncer de mama a nivel mundial, una enfermedad que afecta principalmente a las mujeres, pero también a los hombres.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que se diagnostican cerca de 2.3 millones de nuevos casos de cáncer de mama cada año a nivel global.
En México, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reporta que el cáncer de mama es la principal causa de muerte por cáncer en mujeres mayores de 25 años.
Las empresas tienen un papel crucial en la prevención del cáncer de mama a través de programas de detección temprana y prevención, como la realización de mamografías gratuitas y la flexibilidad en los horarios de trabajo.
La detección temprana del cáncer de mama no solo salva vidas, sino que también genera un ahorro significativo en los costos asociados al tratamiento, según el Banco Mundial.
El tratamiento del cáncer de mama puede ser extremadamente costoso para las familias, incluyendo gastos en tratamientos médicos, cirugía, radioterapia, quimioterapia, medicación, hospitalización y cuidados postoperatorios.
Un estudio de la American Cancer Society reveló que los costos asociados al tratamiento del cáncer de mama en etapas avanzadas pueden ser hasta tres veces mayores que en etapas tempranas.
La cobertura de seguros médicos es insuficiente en muchas partes del mundo, lo que deja a las personas con la difícil elección de endeudarse para poder pagar los tratamientos necesarios.
En países como México y Perú, muchas mujeres en zonas rurales o marginadas no tienen acceso a mamografías o chequeos regulares, lo que dificulta la detección temprana.
Las alianzas entre el sector público y privado pueden ayudar a cerrar las brechas en el acceso a la atención médica, proporcionando servicios de salud esenciales a las poblaciones más vulnerables.
La tecnología ha abierto nuevas posibilidades en la prevención y tratamiento del cáncer de mama, desde aplicaciones móviles para autoexámenes hasta avances en la telemedicina.
Conclusión
El texto de Romero-Delgado destaca la importancia de ir más allá de la concientización sobre el cáncer de mama y abordar las dimensiones financiera, social y económica de la enfermedad. Se enfatiza la necesidad de acciones concretas que impacten positivamente a nivel social y económico, incluyendo la inversión en programas de prevención, la mejora del acceso a la atención médica y la utilización de la tecnología para facilitar la detección temprana y el tratamiento.