El texto de Eduardo Ruiz-Healy del 25 de Octubre del 2024 analiza la situación actual del sistema económico global, contrastando las visiones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y los BRICS.
Resumen
El texto describe dos eventos globales que se desarrollaron en paralelo: la reunión del FMI y el Banco Mundial en Washington, y la cumbre de los BRICS en Kazán, Rusia.
Los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) buscan desafiar el dominio económico occidental, pero su capacidad para alterar el sistema financiero global aún está por verse.
Los BRICS representan el 45% de la población mundial y el 28% del PIB global, y han invitado a otros países a unirse, como Egipto, Etiopía, Irán, los Emiratos Árabes Unidos, Turquía, Azerbaiyán y Malasia.
Uno de los objetivos de los BRICS es crear sistemas de pago alternativos al SWIFT, un sistema controlado por Occidente, para reducir la dependencia del dólar.
Sin embargo, la implementación de este sistema enfrenta grandes obstáculos, ya que el 90% del comercio internacional se realiza en dólares y las economías de los BRICS carecen de la cohesión necesaria para avanzar rápidamente.
Las tensiones entre India y China minan la capacidad del grupo para tomar decisiones conjuntas.
El FMI sigue siendo la fuente de financiamiento más confiable para países en crisis, a pesar de las críticas por sus políticas de austeridad.
El modelo del FMI, basado en décadas de experiencia y el apoyo de las economías más fuertes del mundo, es difícil de desafiar.
Los BRICS se presentan como una respuesta al control occidental, pero las divisiones internas entre sus miembros y las diferencias en sus sistemas económicos son una barrera importante.
México, con su fuerte relación con Estados Unidos a través del T-MEC y su rol dentro del FMI, no tiene prisa por unirse a los BRICS.
El gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum ha priorizado fortalecer los lazos económicos con Estados Unidos.
Conclusión
El texto sugiere que la verdadera competencia entre el modelo del FMI y la visión de los BRICS aún está por desarrollarse. El futuro del sistema económico global será cada vez más multipolar, pero el FMI sigue dominando el terreno con su modelo de financiamiento y sus reformas estructurales.