El texto de Jorge Ramos Ávalos publicado en Reforma el 12 de octubre de 2024, reflexiona sobre el impacto del cambio climático en la frecuencia e intensidad de los huracanes, utilizando como ejemplo el huracán Milton, que alcanzó la categoría 5.
Resumen
Jorge Ramos Ávalos describe la conmoción del meteorólogo John Morales del Canal 6 de Miami al anunciar la categoría 5 del huracán Milton, destacando la posibilidad de una nueva clasificación -Categoría 6- para huracanes de mayor intensidad.
Ramos Ávalos relata su experiencia personal con huracanes en el sur de la Florida, mencionando eventos como el huracán Andrew (1992), Katrina (2005) y María (2017).
El autor destaca la vulnerabilidad de las poblaciones costeras ante los huracanes, mencionando la reciente afectación de Tampa por Milton y la amenaza constante para ciudades como Miami, Acapulco y otras poblaciones del Golfo de México, el Atlántico y el Pacífico.
Ramos Ávalos cita al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, quien en marzo de 2022 declaró que la crisis climática había superado el "punto de no retorno".
El autor menciona que las temperaturas globales han superado los 1.5 grados centígrados en comparación con el promedio de la era preindustrial (1940), un límite establecido por científicos y Naciones Unidas para controlar el calentamiento global.
Ramos Ávalos entrevista al meteorólogo Albert Martínez del Weather Channel, quien confirma que el "punto de no retorno" ya se ha pasado y que la adaptación al cambio climático es inevitable.
El autor destaca la responsabilidad de los países más ricos del mundo (G-20) en la emisión de gases de efecto invernadero y la necesidad de presionarlos para reducir sus emisiones.
Ramos Ávalos concluye que el futuro ya ha llegado y que la adaptación al cambio climático es una necesidad urgente.
Conclusión
El texto de Jorge Ramos Ávalos es un llamado a la acción ante la realidad del cambio climático y sus consecuencias devastadoras. El autor enfatiza la necesidad de adaptarse a un nuevo futuro marcado por eventos climáticos extremos, mientras que también exige una acción urgente por parte de los países más ricos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.