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Este texto de Carlos A. Pérez Ricart, publicado el 16 de enero de 2025, en REFORMA, establece una comparación entre los regímenes de Nicolás Maduro en Venezuela y Augusto Pinochet en Chile, destacando las similitudes en sus prácticas represivas y la respuesta de la comunidad internacional. El autor critica la postura de algunos sectores de la izquierda mexicana que, según él, ignoran las violaciones de derechos humanos en Venezuela.

Más de 3,000 muertos y desaparecidos bajo el régimen de Pinochet, según la Comisión Valech II.

Resumen:

• Se compara el régimen de Nicolás Maduro con el de Augusto Pinochet, señalando similitudes en la duración del poder y en la sistematización de asesinatos, desapariciones y torturas.
• Se cita evidencia de múltiples organismos internacionales como la OEA, la ONU (Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y la Misión internacional Independiente de Investigación sobre Venezuela), Amnistía Internacional, Human Rights Watch, Provea, Foro Penal y Cofavic, que documentan crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
• Se destaca la investigación abierta por la Corte Penal Internacional contra Nicolás Maduro.
• Se describe la estrategia de ambos dictadores de negar las acusaciones de violaciones a los derechos humanos, utilizando discursos similares.
• Se menciona la expulsión del personal de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos de Caracas en febrero de 2024, por orden de Maduro.
• Se critica la postura de algunos sectores de la izquierda mexicana que minimizan las violaciones de derechos humanos en Venezuela.
• Se menciona la ruptura de relaciones diplomáticas entre México y Chile durante el régimen de Pinochet, y se propone que México adopte una postura similarmente firme ante la situación en Venezuela.
• Se menciona que 1,550 personas fueron encarceladas en diez días en Venezuela tras las elecciones de julio (según Foro Penal).

Conclusión:

• El autor considera que la defensa de los derechos humanos debe anteponerse a las divisiones ideológicas.
• Se insta a una postura consecuente por parte del gobierno de México con su historia de promoción y protección de los derechos humanos en América Latina.
• Se critica la indiferencia de algunos sectores ante la evidencia de crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
• Se concluye que la negación de la realidad por parte de los regímenes represivos es una estrategia común para justificar sus acciones.