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El texto de Magdalena Gómez, escrito el 14 de enero de 2025, analiza la consulta pública para la elaboración del Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030 (PND) en México, poniendo especial énfasis en la participación de los pueblos indígenas y afromexicanos. Se critica la forma en que se han llevado a cabo estas consultas en el pasado y se cuestiona la efectividad del proceso actual.

El texto critica fuertemente la falta de respeto a los derechos de consulta de los pueblos indígenas y afromexicanos en el proceso de elaboración del PND.

Resumen

• Se están realizando foros de consulta para el Plan Nacional de Desarrollo 2025-2030 (PND).
• La práctica de usar foros como consultas data de varias décadas, pero no siempre respeta las especificidades jurídicas de los pueblos indígenas y afromexicanos.
• La consulta para el Tren Maya es presentada como un ejemplo de proceso que no cumplió con los estándares internacionales, según la ACNUDH-México y la OIT.

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• La reforma constitucional en materia indígena y afromexicana (publicada el 30 de septiembre de 2024) está en proceso de reglamentación.
• El Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) convocó a una consulta en Morelia, Michoacán, el 19 de enero, con cinco ejes temáticos.
• La convocatoria incluye la participación del INPI, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y el Consejo Nacional de Pueblos Indígenas (CNPI).
• La autora cuestiona la efectividad y buena fe de la consulta, considerando que puede ser un proceso superficial y ajeno a las necesidades reales de los pueblos.
• Se menciona el encuentro del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en Chiapas del 28 de diciembre de 2024 al 2 de enero de 2025, como ejemplo de consulta y organización propia de los pueblos.
• La autora concluye que los derechos de los pueblos indígenas no se pueden limitar a los foros oficiales.

Conclusión

• La consulta para el PND 2025-2030 presenta serias dudas sobre su efectividad en la representación de los pueblos indígenas y afromexicanos.
• El proceso actual parece repetir patrones históricos de indigenismo que no garantizan la participación real y libre de estos pueblos.
• Se propone la necesidad de una mayor exigencia en la aplicación de los derechos de consulta, involucrando a todos los niveles de gobierno.
• La resistencia y la autodeterminación de los pueblos, ejemplificada por el EZLN, representan una alternativa a los mecanismos oficiales de consulta.