El texto describe la situación de las personas migrantes en la ciudad de México, centrándose en las necesidades de salud que enfrentan y las dificultades que encuentran para acceder a la atención médica.
Resumen
En la Ciudad de México, específicamente en la calle Clave, se ha formado un campamento de personas migrantes provenientes de diversos países como Haití, Venezuela, Ecuador, Cuba, Honduras, Guatemala, Angola, China, India y Afganistán.
Estas personas buscan refugio en México debido a la pobreza, la violencia, la marginalidad, las emergencias ambientales y la pérdida de sus tierras o bienes.
La permanencia en los campamentos puede durar entre tres y seis meses, o incluso más, mientras esperan obtener el reconocimiento de la condición de refugiada en México o una cita para ingresar a Estados Unidos como solicitantes de asilo.
Las personas migrantes enfrentan graves problemas de salud debido a las condiciones de su viaje, la falta de acceso a servicios de salud en sus países de origen y la discriminación que sufren en México.
Entre las afectaciones a la salud se encuentran enfermedades respiratorias, gastrointestinales, musculares, padecimientos dermatológicos, infecciones urinarias o de transmisión sexual, entre otras.
La atención a la salud sexual y reproductiva es especialmente preocupante, ya que muchas mujeres migrantes están embarazadas o tienen bebés recién nacidos.
Los albergues han creado rutas de canalización para la atención a la salud en los servicios públicos, pero aún existen barreras debido a la discriminación y la xenofobia.
Las detenciones migratorias arbitrarias y los desalojos forzosos de los campamentos por parte de las autoridades migratorias incrementan las afectaciones a la salud física y mental de las personas migrantes.
La protección de la salud de las personas migrantes es un reto colectivo que requiere la participación de los servicios de salud públicos y privados, las comunidades de tránsito y de destino, y la implementación de programas y modelos de atención a la salud sexual y reproductiva especializados e incluyentes.
La Ciudad de México es considerada una ciudad santuario, según la Ley de Interculturalidad y Atención a Migrantes, y cuenta con un modelo de atención para la Interrupción Legal del Embarazo con 17 años de antigüedad.
