El texto de Por México Hoy del 16 de septiembre de 2024 aborda la problemática del tratamiento de aguas residuales en México. El artículo destaca la ineficiencia del sistema actual y la necesidad de una transformación profunda para garantizar un futuro sostenible.
Resumen
En México, solo el 67% de las 2,786 plantas municipales de tratamiento de agua residual (PTAR) operan, con una eficiencia estimada inferior al 40%.
La falta de colectores, mantenimiento y presupuesto para la energía eléctrica son las principales causas de la ineficiencia.
Las PTARs generan lodos activados que son materia orgánica susceptible de generar emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
Estos lodos no se aprovechan y generan altos costos de disposición final.
El biogás producido por los lodos es una fuente de energía limpia y renovable, pero muchas PTARs se encuentran inactivas debido a la falta de presupuesto.
La contaminación de ríos, lagos, litorales y aguas subterráneas es una consecuencia directa de la ineficiencia del sistema de tratamiento de aguas residuales.
Se requiere una nueva cultura del agua que fomente el uso responsable y el pago por el consumo.
Es necesario fortalecer las instituciones dedicadas al desarrollo y transferencia de tecnología para el agua y la energía, así como los centros de investigación del sector agroalimentario, forestal y de gestión integral de residuos.
Se debe realizar una campaña de concientización para promover una nueva relación con el agua y la energía a nivel individual, empresarial, municipal y social.
El tratamiento del agua residual debe priorizar a los municipios con menor densidad poblacional, que se encuentran en situación vulnerable por pobreza energética e hídrica.
Se necesita un nuevo modelo institucional y jurídico para la administración y gestión del agua y la energía, basado en la planeación democrática de estos recursos estratégicos para la NACIÓN.
Conclusión
El texto de Por México Hoy presenta un panorama crítico de la situación del tratamiento de aguas residuales en México. La falta de inversión, la ineficiencia del sistema actual y la falta de una cultura del agua responsable ponen en riesgo la sostenibilidad del país. Se requiere una acción urgente y coordinada para transformar el sistema y garantizar un futuro sostenible para México.
