¿Qué es -y qué no es- terrorismo? ¿Por qué importa definirlo bien?, escribe Mauricio Meschoulam

El texto de Mauricio Meschoulam del 9 de Diciembre del 2025 aborda la complejidad y la carga política del término "terrorismo", argumentando que su uso indiscriminado diluye su significado y dificulta su estudio y abordaje. Se enfatiza la necesidad de una definición específica para comprender y mitigar este fenómeno.

El terrorismo no es cualquier violencia "elevada", sino una categoría específica de violencia con características propias, determinada por sus efectos psicológicos y no solo por su letalidad.

📝 Puntos clave

• La palabra "terrorismo" es políticamente cargada y a menudo se usa para descalificar opositores.
• El terrorismo no se define por su grado de letalidad, sino por sus efectos psicológicos y su propósito de generar miedo.

• Publicidad
• Una definición clara es crucial para estudiar, entender y abordar el terrorismo de manera específica.
• Autores como Schmid y Jongman identifican elementos comunes en las definiciones de terrorismo, como violencia, política y miedo.
• El Instituto para la Economía y la Paz (IEP), utilizando la base de datos del START de la Universidad de Maryland, clasifica un acto como terrorista si es intencional, perpetrado por un actor no estatal, usa o amenaza con violencia, y busca metas políticas, económicas, religiosas o sociales, o intenta coaccionar a una audiencia mayor, o viola el derecho internacional humanitario.
• Se propone una definición de trabajo: el terrorismo es el empleo de violencia contra civiles o no combatientes para generar shock y terror en terceros, con el fin de transmitir un mensaje o reivindicación y ejercer presión sobre actores clave para alcanzar objetivos, normalmente políticos.
• Generalmente, los actores estatales son excluidos como practicantes de terrorismo, ya que se considera una herramienta de combate asimétrico.

🤖 Análisis con Bots

Dice IA en modo bot pesimista:

El texto subraya la ambigüedad y la manipulación política del término "terrorismo", lo que lleva a una confusión generalizada y a la ineficacia en su combate. La constante redefinición y el uso partidista de la palabra impiden una comprensión clara, dificultando la identificación de actores y la implementación de soluciones efectivas. La falta de una definición universalmente aceptada y la tendencia a equiparar cualquier violencia extrema con terrorismo, sin considerar sus motivaciones o métodos específicos, es un obstáculo significativo para abordar este fenómeno de manera seria y coherente.

Dice IA en modo bot optimista:

El texto ofrece una perspectiva valiosa al destacar la importancia de definir el terrorismo de manera precisa y académica, separándolo de otras formas de violencia. Al proponer criterios claros y basarse en revisiones bibliográficas y bases de datos reconocidas como las del START y el IEP, se abre la puerta a un estudio más riguroso y a la formulación de estrategias más efectivas. La distinción entre la violencia terrorista y otras violencias, enfocándose en sus efectos psicológicos y su propósito de generar miedo para influir en una audiencia más amplia, es un paso crucial para comprender y mitigar este fenómeno.