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Este texto de Manuel Molano, escrito el 18 de diciembre de 2024, describe un estudio realizado para la APEAM (Asociación de Exportadores de Aguacate de Uruapan) sobre la derrama económica de la agroindustria del aguacate en Michoacán. El autor combina sus experiencias personales con datos económicos para analizar el impacto de este cultivo en la economía mexicana y estadounidense.

Resumen:

• El estudio utilizó las matrices de insumo-producto a nivel estatal del INEGI, basadas en el Censo Económico de 2019, destacando la labor titánica del cálculo y la contribución del Dr. Daniel Chiquiar.
• El aguacate representa el 40.4% del PIB agrícola michoacano y cerca del 4% del PIB estatal. Michoacán produce el 70% de los aguacates de México, seguido por Jalisco con un 7%.
• Aproximadamente la mitad de la producción se consume en México y la otra mitad se exporta a Estados Unidos, generando entre 0.015 y 0.04% del PIB de los 48 estados contiguos continentales.
• En 2024, el aguacate generó 59 mil 152 millones de pesos directamente en el campo en México, y una derrama económica total (incluyendo industrias relacionadas) cercana a los 178 mil 264 millones de pesos.
• Se estiman 78 mil 126 empleos directos en los municipios productores (datos de la ENOE del INEGI) y 140 mil empleos adicionales en zonas urbanas, siendo esta última una posible subestimación.
• Cada peso invertido en la producción de aguacate genera 2.07 pesos de actividad económica total, distribuidos en diferentes sectores (industrias primarias, alimentos, hospitalidad, educación y salud).
• El aguacate se destaca como una industria renovable y sustentable, con un producto superior a la competencia internacional, compitiendo con los berries por el tercer lugar en exportaciones de agroproductos de México.

Conclusión:

• El estudio resalta la importancia económica del aguacate en México, especialmente en Michoacán.
• El "oro verde" representa una solución al problema de la falta de valor agregado en el campo.
• La investigación destaca la calidad de los datos del INEGI (ENOE y Censo Agropecuario) como herramientas cruciales para el análisis económico.
• El autor enfatiza la necesidad de agregar valor a los productos agrícolas para impulsar el desarrollo económico.