Este texto de Antonio Navalon, escrito el 16 de diciembre de 2024, analiza las consecuencias geopolíticas del ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre de 2023, y su impacto en la caída del régimen de Bashar al Asad en Siria. El autor explora las complejas relaciones entre Israel, Siria, Rusia, Estados Unidos, Irán, Turquía, y otros actores regionales, en un contexto marcado por la guerra en Ucrania y el regreso de Donald Trump a la presidencia estadounidense.
Resumen:
El ataque de Hamás a Israel, con el apoyo de Hezbolá, Siria, Irán y Rusia, marcó el inicio del fin de la dictadura de Bashar al Asad.
La guerra en Ucrania, más larga y costosa de lo previsto, influyó en el escenario geopolítico global. El triunfo de Trump se presenta como un factor que podría llevar a un acuerdo en Ucrania, más favorable a Rusia que a Ucrania.
La creación del Estado de Israel en 1948, según la Resolución 181 de la ONU (Mapa de Balfour), ha definido la historia de conflicto en la región.
A pesar de la aparente vulnerabilidad inicial, Israel ha demostrado una gran resiliencia militar y ha salido fortalecido del conflicto, consolidándose como una potencia regional. Sin embargo, su entorno sigue siendo peligroso.
La caída de Damasco afecta a Moscú y da mayor libertad de acción a Turquía en sus alianzas.
El régimen de Háfez al Asad, y posteriormente el de Bashar al Asad, contó con el apoyo de la Unión Soviética y Rusia. Turquía también se benefició de la presencia de los baazistas.
La historia de Siria está intrínsecamente ligada a la religión y a la geopolítica de la región, incluyendo la figura del Mahdi.
La tensión entre Israel y Siria se ilustra con el caso de Eli Cohen, agente del Mosad ejecutado en Siria.
La crisis de refugiados sirios, con más de 13 millones de desplazados, requiere una respuesta humanitaria a la escala de la mostrada por Angela Merkel durante la crisis de 2015.
La caída de la dinastía al Asad plantea interrogantes sobre el futuro de Siria y el papel de Arabia Saudita, Israel, Irán y Turquía.
La presencia de Abu Mohammed al-Jawlani y sus grupos extremistas en Siria representa una amenaza para la seguridad de Israel, llevando a este país a colocar misiles cerca de Damasco.
Conclusión:
La caída del régimen de Bashar al Asad marca un punto de inflexión en la geopolítica de Oriente Medio.
El futuro de Siria es incierto y depende de las acciones de los actores regionales e internacionales.
La situación en Oriente Medio sigue siendo extremadamente volátil y compleja.
La crisis humanitaria en Siria requiere una respuesta internacional coordinada y eficaz.
El papel de Estados Unidos, Rusia, China, Irán, Arabia Saudita, **Tur