Este texto de Gabriela Rodríguez, Secretaria general del Conapo, escrito el 13 de Diciembre de 2024, analiza la relación entre la dinámica demográfica de México y la adopción de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC). Se destaca la importancia de las TIC para la inclusión social y el desarrollo económico, considerando la distribución geográfica y la estructura etaria de la población.
Resumen:
Las TIC son herramientas cruciales para el acceso a la información y la reducción de brechas geográficas, sociales y económicas.
La estructura poblacional de México, con una mayoría en edad productiva y un creciente envejecimiento, requiere una mayor adopción de las TIC para la inserción laboral y el desarrollo profesional.
El crecimiento de las ciudades principales exige que los gobiernos locales integren las TIC en sus agendas para abordar las desigualdades.
En 2023, México contaba con 97 millones de usuarios de internet, siendo el grupo de 18 a 24 años el de mayor porcentaje de usuarios. El uso más frecuente fue para comunicación, redes sociales y entretenimiento.
Las entidades federativas con mayor acceso a internet son Quintana Roo, Baja California y Jalisco. Las de menor acceso son Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
La innovación tecnológica influye en el crecimiento económico al modificar la producción, la infraestructura, el transporte y la comunicación.
El gobierno de México implementa programas como "Aldeas Inteligentes, Bienestar Sostenible" y "Marco de habilidades digitales" para promover la conectividad y las competencias digitales.
El estudio del Conapo, al que se hace referencia, profundiza en la relación entre la dinámica poblacional y el acceso a las TIC en México. Alberto Carrera Portugal, catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México, es uno de los autores del estudio.
Conclusión:
Las políticas públicas deben articular la estructura poblacional con la adopción de las TIC para fomentar la inclusión laboral y el desarrollo profesional.
Es necesario considerar la distribución territorial de la población para aprovechar los polos de desarrollo y promover proyectos comunitarios.
Dimensionar las pautas demográficas y territoriales permite enfocar mejor los esfuerzos para el bienestar y la equidad social.