El texto de Ramón Aguirre, escrito el 13 de diciembre de 2024, analiza el "Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad", firmado el 25 de noviembre de 2024 en Xochimilco, Ciudad de México, y el Programa Nacional Hídrico (PNH) presentado en el mismo evento. El texto destaca la importancia del acuerdo y el programa, pero también resalta los desafíos económicos y financieros para su implementación exitosa.
Resumen:
El Acuerdo Nacional por el Derecho Humano al Agua y la Sustentabilidad, un esfuerzo conjunto del gobierno federal, los 32 estados, sectores agropecuario e industrial e instituciones académicas, prioriza la gestión de los recursos hídricos en México.
El director general de la Conagua, Efraín Morales López, presentó el PNH, que busca garantizar el derecho humano al agua, fomentar la sostenibilidad y promover un manejo responsable del recurso, reconociéndolo como un derecho humano y no una mercancía.
El PNH incluye acciones específicas como la rehabilitación de ecosistemas, mejora de infraestructura, reforestación, restauración de humedales y limpieza de ríos, promoviendo la colaboración entre entidades gubernamentales, sector privado, comunidades indígenas y la academia.
El secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, anunció un programa de tecnificación de riego para 200,000 hectáreas y el programa "Cosechando Soberanía" para apoyar a los productores agrícolas.
Se logró la devolución de 2,800 millones de metros cúbicos de agua, gracias a la colaboración entre el gobierno, distritos de riego y empresas como Grupo Lala, que se comprometen con la sustentabilidad hídrica.
El texto enfatiza la necesidad de una inversión significativa de recursos para la implementación exitosa del PNH, considerando que las tarifas de agua en México son bajas en comparación con la OCDE. Se critica la falta de compromiso de algunos sectores, como agricultores e industrias, en la eficiencia del uso del agua y el pago de derechos.
Conclusión:
El éxito del PNH y el Acuerdo Nacional depende de la inversión suficiente y el compromiso de todos los actores involucrados.
Es necesario un cambio de percepción sobre el costo real del agua, reconociendo que, aunque es un derecho humano, su provisión requiere inversiones significativas.
La participación activa de todos los sectores, incluyendo el gobierno, el sector privado, las comunidades indígenas y la academia, es crucial para lograr una gestión hídrica sostenible y equitativa en México.
El incremento sustancial del presupuesto de la Conagua y la revisión de las tarifas del agua son medidas necesarias para alcanzar los objetivos planteados.