Este texto, escrito por Tawakkol Karman, Saul Perlmutter y Brian Schmidt el 1 de diciembre de 2024, analiza los desafíos globales actuales y propone soluciones para asegurar el futuro de la humanidad en un contexto de creciente incertidumbre política y ambiental, marcado por la segunda presidencia de Donald Trump. El artículo destaca la necesidad de reconstruir la cooperación internacional para enfrentar amenazas existenciales como el cambio climático y la proliferación de conflictos.
Resumen:
Los últimos 80 años han sido los más pacíficos de la historia, con avances significativos en igualdad de género (68,5% de brecha cerrada según el Foro Económico Mundial), alfabetización (87% de adultos alfabetizados) y esperanza de vida (73 años).
Sin embargo, el Boletín de los Científicos Atómicos ha situado el Reloj del Apocalipsis a 90 segundos de la medianoche, reflejando una creciente amenaza de aniquilación.
La erosión de la democracia y la cooperación internacional, exacerbada por la desinformación en las redes sociales, plantea un serio desafío.
El cambio climático, con cada año más cálido que el anterior, se acerca peligrosamente a puntos de inflexión críticos.
La cooperación global es esencial para superar estos desafíos. Se debe reconstruir una cultura global basada en la confianza en instituciones como la investigación académica, las instituciones científicas, el periodismo profesional y las agencias gubernamentales transparentes.
Se necesita un impulso renovado en la educación ciudadana global y plataformas de colaboración intercultural.
Las democracias deben liderar la construcción de una cultura global de cooperación, reformando instituciones internacionales como las Naciones Unidas (especialmente el Consejo de Seguridad de la ONU) y la Corte Penal Internacional.
Se requieren nuevos controles sobre el uso de armas nucleares, incluyendo el compromiso con los principios de "no primer uso" y "no autoridad única", con el objetivo final de reducir los arsenales nucleares a cero.
Conclusión:
El texto concluye que, a pesar de los monumentales desafíos, el progreso es posible si la humanidad se une en torno a valores compartidos y un sentido de propósito común. Reavivar el espíritu de cooperación es la tarea más urgente para asegurar un futuro seguro para la humanidad.
