Este texto analiza la nueva estrategia de compra consolidada de medicamentos implementada por el gobierno de Claudia Sheinbaum, en México, y su impacto en la industria farmacéutica. Se destaca la importancia de la transparencia y la planificación mejorada, pero también se señalan las dudas y reservas que persisten sobre su implementación efectiva. Adicionalmente, se incluyen dos notas breves sobre eventos relevantes en el sector salud mexicano.
Resumen
La nueva estrategia de compra consolidada de medicamentos busca solucionar el desabasto de medicamentos en hospitales públicos, un problema significativo durante la administración de Andrés Manuel López Obrador.
La iniciativa, impulsada por Claudia Sheinbaum y Eduardo Clark, subsecretario de Integración y Desarrollo del Sector Salud de la Secretaría de Salud (SSa), involucra a 26 instituciones del sector salud y una plataforma digital para mejorar la transparencia y la planificación.
Existe preocupación sobre la capacidad de Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México (Birmex) para gestionar la distribución sin apoyo externo de distribuidores privados. La industria farmacéutica considera crucial la participación de estos últimos para evitar problemas de abasto.
Se establecieron sanciones por retrasos en la entrega (2.5% por día), pero existen reservas sobre la aplicación de detalles operativos y la necesidad de actualizar los requisitos de compra.
A pesar de las reservas, se reconoce una mayor disposición al diálogo por parte del gobierno actual, en comparación con la administración anterior, lo cual se considera un avance significativo. Las reuniones entre la Secretaría de la Función Pública (SFP) y la industria farmacéutica reflejan esta apertura.
La iniciativa presenta elementos positivos como la planificación anticipada y la mayor transparencia, pero su éxito dependerá de la resolución de los desafíos operativos pendientes.
En la Medical Expo 2024 en CDMX, se discutieron los desafíos y oportunidades para modernizar la atención médica pública, destacando un convenio entre AMID, Canifarma y ANAPS para mejorar la competitividad y trazabilidad de dispositivos médicos. Se instó al gobierno a adoptar una “economía de la salud” que priorice el bienestar del paciente y la transparencia en el gasto.
La nueva vacuna de Pfizer contra Covid-19, adaptada para el linaje JN1.2, ya está disponible en México tras su aprobación por Cofepris.
Conclusión
La estrategia de compra consolidada de medicamentos presenta un cambio positivo con respecto a la situación anterior, pero su éxito dependerá de la efectiva resolución de los desafíos operativos y de la colaboración entre el gobierno y la industria farmacéutica. La transparencia y el diálogo son cruciales para evitar una nueva crisis de abasto en el sistema de salud mexicano. Los próximos pasos serán determinantes para evaluar la verdadera eficacia de esta iniciativa.
