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Este texto analiza la efectividad de las "mañaneras" de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo cincuenta días después de asumir su cargo, cuestionando su utilidad y costo-beneficio. El autor argumenta que su evaluación debe hacerse en sus propios términos, sin compararla con las mañaneras de administraciones anteriores.

Resumen:

• El autor compara las audiencias ciudadanas de Sheinbaum como Jefa de Gobierno de Ciudad de México con sus actuales mañaneras, señalando que mientras las primeras eran más enfocadas y eficientes, las segundas son una mezcla de quejas particulares, halagos, actualizaciones de pendientes y temas impredecibles.
• Se describe un ejemplo de la mañanera donde se trataron temas diversos y poco relevantes, como una solicitud relacionada con Osaka, Japón, y una alabanza al gobierno de Tamaulipas. También se menciona la falta de respuesta clara de la Presidenta a una pregunta sobre un diputado panista en la COP19 en Bakú.
• Se destaca la presentación del Plan Hídrico como un tema importante para el legado de Sheinbaum, pero que no se profundizó debido a la naturaleza superficial de la mañanera. Se critica el ataque de la Presidenta al INAI con datos sesgados.
• El autor concluye que la mañanera sirve principalmente como herramienta de propaganda para los medios afines al gobierno, saturando la información en medios y redes sociales. Se cuestiona la eficiencia del uso del tiempo de la Presidenta, dedicando más de dos horas a un formato que podría ser más conciso.
• Se critica la atención a peticiones particulares y grupos de interés durante la mañanera, en lugar de abordar temas importantes como la violencia en Guerrero, específicamente en Cuajinicuilapa. Se argumenta que la mañanera no está diseñada para abordar problemas serios.
• Finalmente, el autor concluye que la mañanera es un éxito en términos de propaganda, aunque a un alto costo en tiempo presidencial.

Conclusión:

El autor argumenta que las mañaneras de Claudia Sheinbaum Pardo son una herramienta efectiva de propaganda gubernamental, pero ineficientes en cuanto a la gestión de tiempo presidencial y la atención a problemas relevantes. Su formato actual prioriza la difusión de información favorable al gobierno sobre el abordaje profundo de temas de importancia nacional. El costo-beneficio de este formato es cuestionable, dado el tiempo invertido y la falta de profundidad en el tratamiento de asuntos cruciales.