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Este texto de Juan Carlos Talavera, escrito el 16 de noviembre de 2024, analiza el impacto del Proyecto del Presupuesto de Egresos de la Federación (PPEF) en el sector cultural mexicano, particularmente en el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y otras instituciones culturales. El autor critica la significativa reducción presupuestal y sus consecuencias para la preservación del patrimonio cultural.

Resumen:

• Se proyecta un recorte del 30.9% al presupuesto del sector cultura para 2025, según el PPEF entregado a la Cámara de Diputados.
• El INAH, dirigido por Diego Prieto, sufrirá el recorte más severo, con una reducción del 47% en su presupuesto (de 8 mil millones de pesos a 4,401 millones de pesos). Esto dificultará la adquisición de terrenos en zonas arqueológicas como Uxmal, Chichén Itzá y Mayapán, en Yucatán.
• El autor cuestiona las justificaciones para el recorte, argumentando que proyectos importantes como la restauración de inmuebles dañados por los sismos de 2017 aún no se han completado.
• Se critica la minimización de las protestas y cartas de rechazo a la permanencia de Diego Prieto al frente del INAH, firmadas por reconocidos investigadores como Leonardo López Luján, Bolfy Cottom, Noemí Castillo y Jesús Jaúregui.
• La Dirección de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, aparentemente dirigida por Arturo Balandrano, experimentará una reducción del 72.4% en su presupuesto (de 289.3 mdp a 83.2 mdp), poniendo en riesgo la finalización de la restauración de inmuebles afectados por los sismos de 2017. Se cita a Alejandra Frausto, extitular de la SC, sobre la necesidad de concluir la restauración.
• La subsecretaría de Desarrollo Cultural, dirigida por Marina Núñez Bespalova, sufrirá una reducción del 46% en su presupuesto (de 1,125 mdp a 625.5 mdp).
• Otras instituciones como el INEHRM, Radio Educación, el INBAL y el Fondo de Cultura Económica también experimentarán recortes menores en sus presupuestos.

Conclusión:

El texto de Talavera evidencia una profunda preocupación por el futuro del patrimonio cultural mexicano ante los severos recortes presupuestales. El autor cuestiona la justificación de estas reducciones y alerta sobre las consecuencias negativas para la preservación del patrimonio y la continuidad de proyectos cruciales. La situación pone en entredicho la capacidad del sector cultural para cumplir con sus objetivos y responsabilidades.