Este texto de Mario Luis Fuentes, escrito el 11 de noviembre de 2024, analiza la situación de violencia en México, basándose en datos de diferentes organizaciones y fuentes oficiales, mostrando una preocupante continuidad de la violencia a pesar de las estrategias gubernamentales.
Resumen
Causa en Común reporta al menos 187 masacres en México hasta junio de 2024, definiendo masacre como el asesinato simultáneo e intencional de tres o más personas.
Un reciente evento en Querétaro, el 9 de noviembre de 2024, dejó 10 muertos y 7 heridos en un ataque a un bar.
En los primeros 40 días de la administración 2024-2030 se registraron más de 3000 homicidios dolosos. Los grupos criminales exhiben una violencia cada vez más extrema, buscando sembrar miedo e imponer su poder.
Las entidades con mayor número de masacres son Guanajuato, Jalisco, Guerrero, Baja California y Tabasco. Querétaro y Baja California Sur, antes con menor incidencia, ahora muestran un aumento preocupante.
El Centro-Occidente de México concentra la mayor parte de los eventos de tortura, desaparición forzada, ejecuciones públicas y asesinatos crueles contra mujeres.
Entre enero y junio de 2024, al menos 5000 personas fueron víctimas de actos crueles de grupos delincuenciales.
Los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública muestran una cifra similar de homicidios dolosos entre 2023 y 2024 (alrededor de 22,000), desmintiendo las afirmaciones gubernamentales de reducción de la violencia.
Las lesiones dolosas aumentaron en un 1.5% entre 2023 y 2024, mientras que los feminicidios disminuyeron ligeramente.
El texto concluye que en los últimos dos años no se han logrado avances significativos en la pacificación del país, y que la falta de urgencia por parte del gobierno y el Congreso es tan preocupante como la violencia misma.
Conclusión
El texto de Mario Luis Fuentes presenta un panorama sombrío de la violencia en México, evidenciando la ineficacia de las estrategias gubernamentales y la necesidad urgente de acciones más contundentes para combatir la creciente ola de crímenes y la impunidad que los rodea. La persistencia de altos índices de homicidios, masacres y otros crímenes violentos, a pesar de los datos oficiales, refleja una situación crítica que demanda una respuesta inmediata y efectiva por parte de las autoridades.