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Este texto analiza la controvertida reelección de Rosario Piedra como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en México, cuestionando su idoneidad y la influencia del partido político Morena en el proceso. El artículo destaca la baja calificación obtenida por Piedra en el proceso de evaluación y contrasta su perfil con el de otros candidatos mejor evaluados.

Resumen:

• Rosario Piedra, candidata a la reelección como presidenta de la CNDH, obtuvo una calificación muy baja (1 de 15 puntos) en el proceso de evaluación, a diferencia de otros candidatos como Nashieli Ramírez (15 puntos), Tania Ramírez (12 puntos), Paulina Hernández (11 puntos), Karla Alejandra Obregón (7 puntos) y Carlos Pérez Vázquez (6 puntos).
• A pesar de su baja calificación, Piedra fue incluida en la terna final para la presidencia de la CNDH, gracias a la intervención de Javier Corral, presidente de la Comisión de Justicia del Senado, quien argumentó la necesidad de consenso político.
• Varias organizaciones de la sociedad civil, incluyendo 12 de las 14 que participaron en un parlamento abierto en el Senado el 22 de octubre, se pronunciaron en contra de la reelección de Rosario Piedra, debido a preocupaciones sobre su falta de autonomía e independencia del poder ejecutivo.
• Se critica la falta de transparencia y el posible favoritismo político en el proceso de selección, señalando la lealtad de Piedra a Andrés Manuel López Obrador.
• El texto cuestiona la capacidad de Piedra para identificar y abordar violaciones a los derechos humanos, dado su aparente incapacidad para detectar una carta de apoyo falsa en su expediente.
• Se menciona la situación del INE y su consejera presidenta Guadalupe Taddei, como ejemplo de la influencia de la 4T (Cuarta Transformación) en instituciones mexicanas.

Conclusión:

El texto de Fabiola Guarneros Saavedra del 10 de Noviembre de 2024 presenta una crítica contundente a la reelección de Rosario Piedra como presidenta de la CNDH, argumentando que este proceso estuvo marcado por la falta de transparencia, el favoritismo político y la priorización del consenso sobre la idoneidad del candidato. Se cuestiona la capacidad de Piedra para defender los derechos humanos de forma independiente del poder ejecutivo, poniendo en riesgo la autonomía de la CNDH. La inclusión de la situación del INE refuerza la idea de una tendencia generalizada de influencia política en instituciones clave de México.