El texto de Lina Pohl del 31 de Octubre del 2024 aborda la problemática de la falta de seguridad en la tenencia de la tierra para las mujeres rurales en México y su impacto en la inclusión de las mujeres en el desarrollo agrícola y la seguridad alimentaria.
Resumen
La falta de titularidad y control sobre los recursos de la tierra limita la capacidad de las mujeres campesinas para aprovechar al máximo sus derechos.
La nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha destacado la importancia de impulsar el reconocimiento y desarrollo de las mujeres rurales, especialmente en el acceso a la tierra y los recursos productivos.
A pesar de los avances en el reconocimiento de los derechos de tenencia de las mujeres rurales, la disparidad en el acceso a la tierra sigue siendo un desafío importante.
El Atlas de la Propiedad Social de la Tierra en México 2024 muestra que los hombres representan la gran mayoría de los titulares de la tierra en el país, con más del 70% de las tierras en manos masculinas.
Para que las mujeres campesinas puedan hacer un uso más eficiente de la tierra, es fundamental que tengan acceso a la tierra, control sobre el manejo de sus recursos y los incentivos económicos que brinda la seguridad en la tenencia.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha promovido políticas inclusivas y brindado asistencia técnica en colaboración con el gobierno mexicano para fortalecer los derechos agrarios de las mujeres en México.
En los estados de Jalisco y Oaxaca, la FAO ha trabajado en un plan de acción para abordar los desafíos específicos de las jornaleras agrícolas.
Las estrategias implementadas han involucrado al sector público y privado, así como a organizaciones de la sociedad civil y la academia.
La FAO continúa con las acciones de protección social hacia grupos como las mujeres y juventudes rurales, promoviendo la formalización económica y laboral.
Conclusión
El texto destaca la importancia de reconocer y fortalecer el papel de las mujeres en la gestión y protección de la tierra para construir una producción más eficiente, mejorar la nutrición, promover un entorno más saludable y asegurar una vida digna para todas y todos. La seguridad en la tenencia de la tierra es fundamental para la inclusión de las mujeres rurales en el desarrollo agrícola y la seguridad alimentaria.