Rosario pasó de Piedra a lastre para la 4T

Introducción

El texto de Salvador García Soto, publicado el 26 de octubre de 2024, critica duramente la gestión de Rosario Piedra Ibarra como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y su intento de reelección. El autor argumenta que su gestión ha sido un fracaso y que su permanencia en el cargo sería perjudicial para la institución.

Resumen

• Rosario Piedra Ibarra se presentó ante el Senado para defender su intento de reelección como presidenta de la CNDH, argumentando que busca "consolidar lo logrado".
• García Soto cuestiona qué es lo que Piedra Ibarra quiere "consolidar", señalando que su gestión ha sido marcada por el desmantelamiento y la colonización de la CNDH para favorecer los intereses políticos del gobierno.
• El autor destaca que la gestión de Piedra Ibarra ha sido reprobada por 12 de los 13 colectivos defensores de derechos humanos que participaron en el "parlamento abierto" del Senado.

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• Organizaciones como el Centro Agustín Pro, Artículo 19, la Red por los Derechos de la Infancia, Documenta AC, Cea Justicia Social y colectivos de Madres Buscadoras como el 10 de Marzo han pedido a los senadores que no avalen la reelección de Piedra Ibarra.
• Las Madres Buscadoras han criticado a Piedra Ibarra por su inacción ante los asesinatos de civiles cometidos por militares y la califican como "un florero en esa posición, lo peor que le ha pasado a la Comisión desde su creación".
• Durante su comparecencia ante el Senado, Piedra Ibarra fue fuertemente cuestionada por senadores de la oposición, quienes le pidieron que renunciara.
• La presidenta Claudia Sheinbaum se deslindó de apoyar la reelección de Piedra Ibarra, aunque la calificó como "un símbolo" por ser hija de Rosario Ibarra de Piedra.
• El texto señala que la mayoría de los senadores de Morena no defendieron a Piedra Ibarra durante su comparecencia, lo que confirma que no cuenta con el apoyo del gobierno para continuar al frente de la CNDH.

Conclusión

El texto de Salvador García Soto evidencia un fuerte rechazo a la gestión de Rosario Piedra Ibarra como presidenta de la CNDH y a su intento de reelección. El autor argumenta que su gestión ha sido un fracaso y que su permanencia en el cargo sería perjudicial para la institución. La falta de apoyo de Morena a Piedra Ibarra durante su comparecencia ante el Senado parece confirmar que su reelección es poco probable.