El texto de José Carreño Figueras, publicado el 23 de octubre de 2024 en El Heraldo de México, analiza las complejidades de la relación entre Estados Unidos y México en el contexto de las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos.
Resumen
El autor plantea que la relación entre Estados Unidos y México se volverá más compleja, independientemente de quién gane las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
Se espera que la relación pase por un periodo de tensión mientras ambos gobiernos buscan un entendimiento.
Donald Trump, candidato republicano, ha sido más agresivo en sus declaraciones y acciones hacia México que los demócratas.
Kamala Harris, candidata demócrata, ha insinuado la posibilidad de adoptar una postura más dura con México.
Shannon O'Neill, vicepresidente del Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York, considera que existe una oportunidad para un "reinicio" en la relación entre Estados Unidos y México, pero advierte que Estados Unidos podría tomar medidas si Claudia Sheinbaum, la presidenta de México, continúa con políticas que dañen la relación bilateral.
O'Neill también señala que Estados Unidos tendrá que abordar temas como el comercio, la seguridad, la estabilidad política de México y la influencia de China en la relación bilateral.
La administración de Joe Biden ha sido tolerante con las supuestas violaciones del T-MEC (Tratado comercial México-Estados Unidos-Canadá) debido a la importancia electoral de la migración y el papel de México en el control de la frontera sur de Estados Unidos.
El futuro de la integración económica de América del Norte está en juego, y el T-MEC será revisado en 2026.
Marco Rubio, senador republicano, ha declarado que no le preocupa la ideología de un presidente mexicano, siempre y cuando éste tenga en cuenta los intereses de Estados Unidos.
Conclusión
El texto de José Carreño Figueras destaca la importancia de las elecciones presidenciales en Estados Unidos para la relación bilateral con México. El autor sugiere que, independientemente del resultado, la relación entre ambos países se enfrentará a desafíos y tensiones. La postura de Estados Unidos hacia México dependerá del nuevo presidente, pero también de la política interna de México y de la influencia de China en la región.