Este texto, escrito por Ian Bremmer y Marietje Schaake el 17 de octubre de 2024, analiza la capacidad de la ONU para abordar los desafíos globales, especialmente en el contexto de la inteligencia artificial (IA).
Resumen
El texto reconoce que el multilateralismo ha enfrentado dificultades, especialmente en la ONU, con ejemplos como la incapacidad del Consejo de Seguridad de la ONU para detener la invasión rusa de Ucrania y la falta de progreso en las cumbres de la COP para abordar el cambio climático.
A pesar de estos desafíos, la Cumbre del Futuro de la Asamblea General de las Naciones Unidas demostró la capacidad de la ONU para abordar la IA.
El texto destaca la creación del Órgano Asesor de Alto Nivel sobre IA del secretario general de la ONU, António Guterres, con 39 miembros de diversos sectores y regiones.
Este órgano asesor ha contribuido al Pacto Digital Global, un marco de gobernanza integral para la IA adoptado por los estados miembros de la ONU.
Una de las recomendaciones clave del órgano asesor es la creación de un Panel Científico Internacional sobre IA, similar al Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático, para proporcionar una base fáctica e independiente para la toma de decisiones políticas.
El texto argumenta que la IA tiene el potencial de ser una tecnología de suma positiva, capaz de beneficiar a todos los países y culturas, a diferencia del cambio climático, que presenta desafíos de suma cero.
Se destaca la necesidad de garantizar que la IA se utilice de manera segura y ética, respetando el derecho internacional y las libertades fundamentales.
El texto reconoce el potencial de la IA para contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), pero también advierte sobre los riesgos de una mayor divergencia global si no se gestiona adecuadamente.
Conclusión
El texto concluye que la ONU ha demostrado su capacidad para abordar los desafíos globales, especialmente en el contexto de la IA. La creación del Órgano Asesor de Alto Nivel sobre IA y el Pacto Digital Global son pasos importantes para garantizar que la IA se utilice de manera segura y ética, beneficiando a todos los países y culturas. Sin embargo, se requiere un esfuerzo continuo para abordar los desafíos de la gobernanza global y garantizar que la IA se utilice para lograr los ODS y promover la equidad global.
