El texto de Moises Naim del 14 de Octubre del 2024 explora el preocupante aumento del gasto militar global, destacando su impacto en la seguridad, la economía y el medio ambiente.
Resumen
El mundo gastó 2.4 billones de dólares en armamento y preparativos militares en 2023, un aumento del 7% respecto al año anterior.
Este aumento se debe en parte a las guerras en curso en Ucrania y el Medio Oriente, pero también a una carrera armamentista nuclear.
Estados Unidos está invirtiendo en la modernización de sus misiles Minuteman, el bombardero B-21 y sistemas de comando y control.
Rusia está desarrollando cohetes hipersónicos como el Avangard y sistemas de torpedos nucleares.
China está desarrollando nuevos sistemas de misiles intercontinentales.
India está invirtiendo en el misil balístico Agni-V y otras armas nucleares.
América Latina también está aumentando su gasto militar, con países como Chile, Brasil, Argentina, Colombia, Ecuador y Perú comprando armamento.
El gasto militar global es casi 9 veces la cantidad necesaria anualmente para erradicar el hambre en el mundo.
Las fuerzas armadas son responsables del 5.5% de las emisiones globales que contribuyen al cambio climático.
El argumento de que el gasto militar contribuye a la paz es débil, ya que la historia está llena de ejemplos de guerras que estallaron independientemente de las asimetrías en el gasto militar.
Conclusión
El texto de Moises Naim argumenta que el gasto militar global es una locura que tiene consecuencias devastadoras para la seguridad, la economía y el medio ambiente. Se necesita una colaboración internacional para frenar esta tendencia y redirigir los recursos hacia prioridades más importantes como la educación, la salud y la lucha contra el cambio climático.